Protagonizado por Sarah Paulson y Kiera Allen, la cinta de suspenso Run, se ha convertido en todo un suceso en Netflix y Hulu.
PUBLICIDAD
La trama gira en torno a Diane, una madre soltera que ha estado criando a su hija Chloe (Allen) durante 17 años de manera sobreprotectora debido a los problemas de salud que padece. Pero como es de esperarse, hay algo más oscuro detrás de Diane.
El trabajo de Paulson es impecable pues se ha convertido en una de las favoritas del género tras su participación en la saga de American Horror Story y Ratched.
Ahora es la actriz novata Kiera quien está sorprendiendo a todos.

Nació en 1997 y fue criada en Nueva York. Estudió escritura creativa en la Universidad de Columbia y ha tenido que usar una silla de ruedas desde 2014. Fue ese mismo año que debutó en el cine interpretando a Skye en el cortometraje de Daniel Healey, Ethan & Skye.
Allen se convirtió en la segunda actriz en silla de ruedas en protagonizar un filme de suspenso después de Susan Peters en 1948.
Las producciones de Hollywood siempre han causado controversia con el tema de encontrar actores con discapacidades para interpretar personajes con discapacidades, y muy a menudo dicen que simplemente no pudieron encontrar a la persona adecuada, terminando por caer en interpretaciones poco creíbles.

Recientemente se desató una gran polémica con Happy, escrita y dirigida por la cantante Sia sobre una niña con autismo. En un principio habían elegido a una niña con dicha condición pero los sets luminosos y coloridos estaban demasiado saturados para ella por lo que la cantante recurrió a Maddie Ziegler, que no tiene autismo y terminó «ridiculizando» al personaje debido a una mala dirección.
PUBLICIDAD
Pero Run lo hizo bien.
Por supuesto fue un proceso largo, especialmente porque los castings se hicieron de manera virtual y muchas actrices mintieron con respecto a estar en silla de ruedas hasta que finalmente el director dio con Kiera.
Consciente de la falta de representación real de las personas con capacidades diferentes que existe en la industria, la actriz dijo estar muy honrada de ser parte de este cambio.
“Parece que va a ser la primera vez que mucha gente de mi generación ve a un usuario de silla de ruedas real en la pantalla interpretando a un usuario de silla de ruedas. Es un gran honor», dijo la misma Allen a <em>The New York Times</em> poco antes del estreno.

Aneesh Chaganty, director de la cinta junto con Kiera, ajustaron ciertas escenas con el fin de tener elementos reales que no caricaturizaran a las personas que tienen alguna condición que las llevó a usar silla de ruedas.
“(Chloe) No es una chica que está hecha para ser una víctima o que sólo está ahí para informar el viaje de otro personaje. Ella define su propio viaje», agregó Allen.
Una complicación inesperada
Aunque no se sabe qué sucedió con Kiera, ella misma escribió un artículo para Glamour en el que relató que siempre fue la chica que escalaba árboles en lugar de practicar ballet; que gustaba del rock clásico sobre las bandas de chicos y salir con amigos en lugar de «chismear» con las chicas.

«Esto vino en la escuela secundaria, cuando quedé discapacitada. Usando una silla de ruedas, ocupé más espacio físico del que jamás había contado. No podía disminuir ese cuadrado de cuatro ruedas apoyándome en un pie o inclinando una rodilla hacia adentro. <strong>Al mismo tiempo, me encontré luchando por un espacio de un tipo más metafórico: el espacio para ser una persona plena», </strong>dijo<strong>.</strong>
Sobre el futuro en la industria.
A pesar del gran éxito que está teniendo, la actriz reveló durante una visita al show de Ellen DeGeneres que primero debe terminar la escuela.
«Me estoy enfocando en terminar la escuela y celebrar el momento de este estreno. Están sucediendo tantas cosas en este momento, que estoy tratando de estar presente y permanecer en el momento. Y tengo muchas ganas de lo que venga después «.
Más de este tema
Si te gustó “Corre”, amarás estas otras producciones de su protagonista, Sarah Paulson