La semana pasada Francini Amaral sufrió un accidente mientras bajaba por el circuito Las Varas, en San Carlos de Apoquindo, cuyo aterrizaje la dejó con una fractura de muñeca y en su brazo. «No fue una súper caída, más que nada como que caí mal», aseguró la bailarina antes de someterse a la cirugía.
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Aunque reconoció que el accidente no fue tan grave, reaccionó mal a la caída y por esto terminó con huesos quebrados. «Estaba en una bajada en un sendero que ya conocía. En esta época del año hay mucha piedra y la tierra está más suelta de lo normal porque el cerro está más seco, así que me resbalé, me caí de lado. Tal como los niños se caen con las manos en el piso, así me caí yo», explicó a Lun.
«Mi muñeca parecía una serpiente»
La artista reveló que fue impactante ver cómo quedó su brazo y muñeca con la caída. «Jalé mi muñeca con la otra mano y la di un poco vuelta como para ponerla ‘en el lugar’ y ahí recién miro mi muñeca y parecía una serpiente. Estaba con mi profesor y dos compañeras, quienes me llevaron a urgencias muy rápido», explicó.
«Tenía dos huesos quebrados y uno de ellos, que es el radio, el más grande, estaba molido. Me enderezaron el hueso, me pusieron yeso y después de eso busqué un especialista de muñeca para la cirugía. Ahora tengo una placa en mi radio con tornillos, me hicieron como una reconstrucción del hueso», contó sobre el procedimiento al cual se sometió.
En relación a las cicatrices que podrían quedarle, Amaral aseguró no estar preocupada. «Son heridas de guerra. No estoy ni ahí con las cicatrices. Cuando uno es jovencita se preocupa mucho de esas cosas, pero con la edad uno ve las cicatrices de otra manera. Al final es otra anécdota, otra historia que tendré para contar en la vida. De hecho son dos (cicatrices) porque hubo doble cirugía; una para el ligamento y otra para el hueso, así que tengo una cicatriz al interior del antebrazo, pero también afuera».
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La bailarina intenta bajarle el perfil a lo que le sucedió y vivirlo como una anécdota más. «Sí, he estado súper bien. A nadie le hace feliz fracturarse o tener una caída pero prefiero estar en modo ya, fue y seguir adelante. Obviamente en las noches me duele un poco más y ahí es más angustiante, pero ahora que me operé esperemos que todo eso pase», agregó.
Sobre si se siente insegura de volver a practicar enduro en bicicleta, fue enfática en señalar que no y que espera retomarlo cuando esté recuperada. «Siempre corres algún riesgo practicando cualquier tipo de deporte, así que planeo seguir haciéndolo en el futuro. En dos semanas debería empezar con la kinesiología y desde hoy yo misma debo empezar a mover los dedos. Son como cuatro meses de recuperación, pero espero estar tres semanas piola y después seguir con otro deporte que me gusta, el pádel. Debo aprovechar que mi mano derecha no está accidentada», agregó.
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