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Alena Wicker, la niña que entró a la universidad de 12 años y quiere llegar a la NASA a los 16

La niña prodigio también lucha por ofrecerle oportunidades a las jóvenes afrodescendientes como ella.

Alena Wicker

Con tan solo 12 años, Alena Wicker ya está lista para ingresar a la Universidad Estatal de Arizona el próximo mes de mayo y su historia se ha vuelto viral.

La niña dotada de una gran inteligencia, no solo ha asombrado por su prematuro ingreso a la universidad, sino porque también aspira a llegar la NASA a los 16 años. Su sueño de toda la vida es convertirse en la mujer afro más joven en trabajar para la Nasa y todos están seguros de que lo logrará.

En una entrevista para el programa Good Morning America, Alena Wicker, quien vive en Texas, contó que planea lograr dos especializaciones en ciencia y química astronómica y planetaria.

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Su  idea es construir un vehículo espacial cuando labore como ingeniera en la agencia estadounidense. «Me encantaría construir un rover para ir al espacio», confesó la niña.

Alena Wicker: «Ten los pies en el suelo, pero puedes seguir alcanzando las estrellas«

La prodigiosa niña estadounidense que con a los 12 años ya entró a la universidad está aprendiendo español y árabe. Y, a pesar de su edad, está decidida a seguir luchando por lo que quiere, inspirada en una frase que una vez escuchó de un empleado de correos:

«Estamos en un nuevo año, en una nueva temporada, y ya nadie nos puede retener. Ten los pies en el suelo, pero puedes seguir alcanzando las estrellas«.

La pasión de Alena Wicker por la Nasa la ha llevado a reflexionar sobre la brecha racial y de género que existe en los campos de la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM). Por esto ha creado la página web Brown Stem Girl, para ofrecerle oportunidades a las jóvenes afrodescendientes que quieren ejercer estas profesiones.

«Ella dijo: ‘Mamá, quiero crear esta cultura de niñas Brown en STEM (…) solo quiero hacer algo'», dijo McQuarter sobre la página de su hija.

Nadie que lea la historia de la prematura universitaria puede dejar de compartirla. Es una niña que desde su corta edad dignifica al género femenino y nos muestra lo grandiosas que podemos ser desde pequeñas.

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