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Sobrevive a los viajes de negocios

Una lista de consejos prácticos para que todo te salga de lujo.

Nada más emocionante que el primer viaje de trabajo, pero también es cierto que cuando te lanzan al ruedo para saber qué tan bien te manejas en tu nuevo rol de businessperson medio entras en pánico de que todo termine siendo un desastre.

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Si eres afortunada, te tocarán viajes express de una ciudad a otra en donde vas y vienes el mismo día, pero si eres afortunadísima y te mandan al otro lado del mundo o a otro país, o simplemente muy lejos de casa, no te vendría mal unos cuantos consejitos para que todo salga de lujo.

Ya te dieron fecha y lugar de viaje, ¿y ahora?

Debes recordar que…

  1. Un viaje de negocios no son vacaciones, aunque eso no quiere decir que no puedas turistear un poco.
  2. Prohibidísimo tomarlo como pretexto para enfiestar.
  3. Siempre que tengas oportunidad de hacerlo, aprovéchalos para despejarte de la oficina y no lo conviertas en una mala experiencia.

Tomar en cuenta…

El jet lag es el desajuste temporal de las funciones del cuerpo tras un viaje largo en avión. Si vas muy lejos, trata de tener presente la información necesaria sobre todo en el clima y el horario.

Antes de tomar tu vuelo duerme lo suficiente, mínimo 8 horas para abastecer a tu cuerpo de la energía necesaria para aguantar todo el cambio.

Igualmente intenta dormir lo más posible durante el vuelo, también puedes aprovechar para ir investigando sobre el hotel; en dónde está ubicado y cómo vas a trasladarte a él desde el aeropuerto.

De preferencia agenda tu viaje un día antes de la reunión, para que tengas tiempo de adaptarte, comer bien y descansar.

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En la maleta…

Si vas a presentar algo, lleva un documento impreso y uno digital, en USB, disco duro, súbelo a un documento en línea y una copia a tu correo para evitar cualquier contratiempo.

Ten siempre a la mano el contacto de la persona con la que te vas a reunir y confirma tu reunión al llegar a tu destino.

Adquiere un mapa de la ciudad e investiga las rutas que debes seguir para llegar a los puntos de encuentro. Así como el transporte que debes utilizar.

Lleva una batería externa, adaptador y todos lo necesario para que no te quedes sin tus herramientas al momento de presentar.

Ten siempre contigo el itinerario de tus actividades o tu agenda.

Dependiendo del tiempo que vayas a permanecer fuera de casa, empaca siempre un outfit formal, un cambio de ropa para una reunión casual, uno para un día normal y ropa para dormir.

Viáticos

Primer punto, el dinero que la empresa te otorga para tu viaje es exclusivamente para cubrir los gastos del viaje de negocios, en ningún momento te lo adjudiques.

Siempre trata de llevar algo de dinero extra por cualquier cosa.

Estudia tu presupuesto y no utilices los viáticos para gastos personales ni gastos hormiga.

Lleva un control de todo lo que consumes y siempre pide factura.

Por último, estudia y prepárate, recuerda que en un viaje de negocios eres quien representa tu lugar de trabajo, si das una buena impresión, seguramente tu equipo te dará la confianza suficiente para mandarte a ti a todos lados.

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