El sabor dulce del banano le ha dado la fama de ser una fruta que engorda, pero resulta que no es así. Ser rico en glucosa, fructosa y sacarosa y con alto contenido de potasio, lo convierte en un aliado del cuerpo para construir músculo.
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Los deportistas o cualquier persona que quiera aumentar la masa muscular deben implementar estrategias como consumir más calorías de las que se gastan, aumentar la cantidad de proteínas que se ingieren durante el día e incluir grasas buenas en la alimentación.
Uno de los alimentos que se debe incluir en la dieta diaria es el banano, sobre todo después de cada entrenamiento donde se necesita un aporte suficiente de hidratos de carbono.
¿Comer y no hacer ejercicio?
Pero no es que hay que comerse de tres a seis plátanos diarios y después se sientan a trabajar sin hacer ningún tipo de actividad física, porque obviamente el efecto será el de engordar.
El objetivo es comerse nueve plátanos diarios y realizar actividades físicas, como 30 minutos de cualquier deporte, allí no se sube de peso; por el contrario, te ayuda a desarrollar masa muscular.
Familia de las platanáceas
Según el portal de nutrición UnComo, la banana, guineo o cambur, el plátano pertenece a la familia: musáceas o platanáceas.
Es una planta de raíz vivaz y grandes hojas, que alcanza hasta siete metros y sus hojas tienen hasta tres metros de largo.
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La banana es rico en azúcares naturales como la glucosa, la fructosa y la sacarosa, y debido a su alto contenido de potasio, ayuda al cuerpo a reponerse después de cada sesión de ejercicio intenso.
Es una fruta que tiene mucha variedad y se puede consumir directamente sin ningún proceso una vez maduros o también agregándolo a algún jugo o postre.
Un batido de esta fruta puede ayudar a las personas a reponerse del entrenamiento físico, no solo permitiendo la ganancia de masa muscular, sino también supliendo la ingesta adecuada de proteínas y reponiendo el glucógeno perdido durante la sesión de ejercicio.