Wellness

La importancia de no descuidar nuestra imagen en la cuarentena

Con la pandemia del coronavirus y la cuarentena obligatoria para evitar la propagación de más contagios de coronavirus nos olvidamos de nuestra imagen.

No sé si se sienten identificadas conmigo, pero tras cuatro meses en confinamiento veo cómo nuestra imagen cambió respecto a los cuidados que nos dábamos antes a manera de consentirnos, una muestra tan fiel dela mor propio que nos tenemos.

Al inicio de la cuarentena, disminuyó el uso del maquillaje y la ropa elegante que teníamos en el clóset porque estábamos acostumbrándonos a trabajar desde casa de una forma más cómoda.

Recomendados

Pero pasaron los días y ya nos dimos cuenta que nuestras uñas estaban dañadas, el corte de cabello no se sabía ni qué forma tenía, y ni hablar de las depilaciones. ¿Les pasó?

¿Cómo influyó esto en nuestra psiquis?

Según el análisis de María José Vintimilla, psicóloga clínica, esta situación ha generado un impacto muy fuerte en la población mundial puesto que se ha visto afectado íntegramente el ser humano a un nivel emocional, social, económico y psicológico.

La pandemia ha cambiado rotundamente nuestro estilo de vida, forjándonos a vivir cambios tanto internos como externos, puesto que psicológicamente la humanidad está atravesando por un duelo profundo ya que hemos dejado atrás nuestro estilo de vida, condiciones que han desencadenado un desequilibrio en las dinámicas comportamentales, individuales, sociales y familiares y como consecuencia de esto se evidencia un gran impacto en nuestra salud mental.

«Cabe mencionar que este impacto del cual hablamos si bien ha llegado a afectar a toda la humanidad debemos recalcar que el rol de mujer en este confinamiento se ha visto perturbado, a causa se ha aumentado el nivel de estrés, puesto que se han intensificado sus tareas diarias propias del hogar sumadas a esto teletrabajo, cuidado de hijos, quehaceres domésticos, declinación económica y muchos casos víctimas de violencia intrafamiliar; obligándonos a priorizar necesidades básicas por la incertidumbre de no saber qué pasará, causándonos frustración, ira, miedos y ansiedad por el hecho de no poder cuidarnos internamente y físicamente, haciéndonos sentir poco femeninas», explica la especialista.

Vintimilla dice que aquellas mujeres que han aplazado su asistencia al estilista, dermatólogo, nutricionista, se han visto afectadas sintiéndose así mismas desvalorizadas y desesperadas al verse a un espejo cuestionándose a sí mismo como poco atractivas.

Más allá de lo superficial

«Pero no nos damos cuenta que el aspecto físico va mucho más allá de algo totalmente superficial. De tal forma que coincidimos con dicho refrán ‘somos lo que vestimos’, refrán que nos permite proyectar como nos encontramos internamente.

Por consiguiente ese encuentro con nuestro propio yo, ese yo el cual alimentamos todos los días con nuestras cualidades tanto externas como internas nos permitirán proyectar frente a ese espejo autoconfianza, autonomía y autocuidado, porque el verdadero significado de feminidad esta en nosotros mismo, ya que dentro de cada mujer convive el poder de aceptarse sintiéndose cada vez más bonita, pero la verdadera percepción de belleza se verá proyectada en nuestra satisfacción personal de nuestras vidas.

No obstante sentirnos hermosas o vernos bellas resulta más fácil y asequible que tratar de transformarse en una imagen de ‘mujer de noticia’, ya que todo esto depende de su autoestima y amor propio», enfatiza la psicóloga.

Actualmente la sociedad en la que vivimos ha marcado notablemente a la belleza femenina con grandes expectativas pero de lo que no estamos conscientes es que este concepto de belleza femenina genera frustración, ansiedad, desesperación; características que han sido confirmadas en este tiempo. Sin embargo, debemos tener en cuenta que el dominio de nuestra mente y nuestro estado de ánimo son realmente los mejores componentes individuales que puede transmitir una mujer.

Vintimilla recuerda un experimento social que se realizó actualmente en España denominado “dove parches”, logrando demostrar a la sociedad que realmente existe un confrontamiento interno con la falta de reconocimiento y aceptación personal aspectos que se van despejando o se han ido desempolvando a medida que vamos trabajando nuestro aspecto físico.

Ahora bien cuando realmente no llegamos a percibir nuestra belleza es que no conocemos su significado porque belleza es: alimentarse sano, dormir bien, llevar una vida ordenada, quererse, aceptarse, fortalecerse, aspectos que nos permitirán proyectar a los demás.

Es por eso que debemos desaparecer los estereotipos y exponer los diferentes tipos de belleza e identificar que cada mujer tiene cualidades las cuales deben ser potencializadas y aceptadas permitiéndonos realizar acciones enfocadas en la promoción de la misma.

¿Cómo podemos aceptarnos a nosotros mismo?

Fácil modifica tus hábitos de vida a los cuales estabas acostumbradas a hacerlos en efecto cuídate, socializa, potencia y deshecha todo lo tóxico que no te permite crecer, del mismo modo huye de ese concepto de modelos de belleza dejando a un lado el concepto de mujer perfecta porque esto solo nos enfrasca a resaltar los aspectos negativos y no realmente quienes somos, todas aquellas cualidades positivas que nos caracterizan.

Teniendo en cuenta que nuestra mente será nuestro mejor aliado al momento de modificar nuestros pensamientos permitiéndonos ayudar a mejorar nuestra autoestima viéndose proyectada en nuestra salud física y psíquica.

«Mujer recuerda que tu figura tendrá un gran realce cuando pones ganas y actitud, gritar a los cuatro vientos yo soy hermosa, cuidar de tu alimentación, hacer ejercicio y pensar primero en ti misma tomando en cuenta que todo lo que tú haces es tu motivación interna la cual te permitirá sentirte bella y sentirte comprometida con tu crecimiento personal. APRENDE A VIVIR CONSCIENTEMENTE», recomienda Vintimilla.

Tags

Lo Último


Te recomendamos