1. EVITA IMPONER
PUBLICIDAD
Nadie sabe cómo hacerlo, pero la flexibilidad permite acomodar los planes a las nuevas circunstancias. Evita imponer un sistema sobre tu familia. En el camino se encontrarán las maneras de conciliar las necesidades de todos.
- TÓMALO CON HUMOR
Ríete de ti misma, y así todos podrán reírse de cómo nos equivocamos al improvisar. Ante tanta incertidumbre, las soluciones se van a encontrar en un sistema de ensayo-error. Nadie es perfecto y nadie sabe cómo lidiar con una situación nueva. Mantener el humor permite sobrellevar fracasos. Te anima a volver a intentarlo.
- PRACTICA EL MONOTASKING
Aunque suene poco eficiente, es mejor hacer una cosa a la vez a hacer varias. Si tu plan es leer emails, ayudar a un hijo con una tarea y hacer arroz al mismo tiempo, el estrés y la posibilidad de error serán muy altas. Es mejor dividir el tiempo durante la mañana y dedicarle una hora al trabajo, una hora a las tareas y una hora a la cocina, que estar durante tres horas haciendo las tres cosas en paralelo.
- RESPIRA
La sobrecarga de trabajo doméstico, laboral y educacional puede traducirse en mayor ansiedad, irritabilidad y cansancio, afirma Kendra Cherry, especialista en salud mental para el portal Verywellmind. Date pausas durante la jornada, refúgiate en algún lugar donde puedas estar a solas, cierra los ojos y respira conscientemente. A través de una buena oxigenación, el cuerpo activa el sistema de calma.
- MANTÉN EL AUTOCUIDADO
Un estudio en Canadá, después de una cuarentena de diez días en Toronto, provocada por el virus SARS en 2003, mostró sintomatología ansiosa y depresiva en un 30 por ciento de la población, durante la cuarentena y un mes después. Por eso, aunque la cuarentena estricta acabe, mantén tus tiempos para descansar y distraerte.
La llegada del coronavirus supone un año distinto para todos. Todavía no manejamos sus consecuencias, pero por lo pronto la flexibilidad ha demostrado ser clave para acomodarse a esta nueva realidad. En esta transición será valioso usar un buen tono con los demás, pero también con nosotros mismos. Especialmente en tiempos difíciles, hablarte a ti misma como lo haría quién más te quiere será de gran ayuda.