Pasar muchas horas sentada o de pie, la mala postura, el embarazo, levantar mucho peso, las secuelas de un accidente o una desviación en la columna provocan intensos dolores de espalda que suelen ser difíciles de aliviar.
Volverte dependiente de los analgésicos es la peor opción. Aunque no lo creas, existen ejercicios físicos sencillos, pero súper efectivos para calmar este tipo de molestias en solo 10 minutos.
El primer paso es escoger una superficie estable para acostarte, como la cama o el piso.
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1. Ponte boca abajo
Al mismo tiempo, levanta la cabeza hasta donde puedas, eleva los brazos hacia atrás (la palma de las manos debe mirar hacia arriba) y también las piernas, sin doblarlas.
Imagina que hay tres cuerdas que halan de cada una de esas zonas.
Mantén la posición durante unos segundos.
2. Reposa el cuerpo boca arriba
Eleva tu columna ligeramente en forma de arco, pero sin despegar los glúteos de la superficie.
Rápidamente, regrésala a la posición inicial y arquéala otra vez.
3. Acuéstate con la cabeza hacia arriba
Coloca tus brazos al lado del tronco, con las palmas mirando abajo.
Levanta las piernas (sin flexionarlas) en un ángulo de 45 grados.
Pon a prueba tu resistencia y soporta lo más posible.
4. El puente (boca arriba)
Flexiona las rodillas lentamente, al tiempo que despegas la pelvis del suelo.
Separa las piernas unos 15 centímetros. Los pies deben quedar con la planta pegada al piso.
Puedes sujetar los tobillos con las manos para lograr mayor estabilidad.
Resulta más práctico mantener la cabeza sobre la superficie, sin despegarla.
Haz series durante 10 minutos
Para que reduzca el dolor de espalda, lo ideal es repetir cada ejercicio en series durante unos 10 minutos. Puedes tomarte ese tiempo para comenzar tu rutina o para finalizar una agotadora jornada.
Hacerlo diariamente te garantizará el bienestar que tanto buscas.