Para quienes se inician en la dieta Keto o cetogénica es importante conocer cómo funciona, para evitar excesos y consecuencias negativas en tu organismo. La premisa fundamental de este régimen es inducir la producción de cuerpo cetónicos, a través de un proceso llamado cetosis.
¿Y cómo se produce? A través de la reducción de la principal fuente de energía de nuestro organismo: los hidratos de carbono. Y aunque parezca muy sencillo, es necesario seguir sus principios en la práctica para bajar de peso.
Menos hidratos
Los hidratos de carbono son los proveedores principales de glucosa, de donde nuestro cuerpo se alimenta para realizar sus funciones. Si se reduce su ingesta, el organismo quema la grasa y produce los cuerpos cetónicos; aquí uno de sus secretos más preciados de su efectividad para adelgazar.
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Debes evitar la ingesta de azúcar, cereales y derivados, legumbres y gran parte de las frutas y hortalizas. En la dieta Keto, los hidratos se limitan a un 10% de las calorías díarias, por lo que será necesario basar tu alimentación en proteínas y grasas saludables.
Más proteínas
Al abandonar los hidratos de carbono, la energía deberá salir de las proteínas y grasas saludables. En este caso, se debe preferir fuentes de proteínas magas y nutritivas como las carnes rojas y blancas, pescaos de todo tipo, huevos y lácteos, pero sin azúcar.
Entre las opciones vegetales permitidas están el aguacate, aceitunas, frutos secos y semillas. Y todo bajo un estricto control de las porciones. En el desayuno, por ejemplo, sustituye el pan integral o la avenida por una tortilla, acompañada de aguacate y yogur natural light.
Los expertos recomiendan hacer la dieta Keto bajo supervisión y nunca por tiempo ilimitado, porque tendrá efectos secundarios.