La vagina contiene la piel más delicada y sensible de todo tu cuerpo. Pero, las cosas que parecen inofensivas te pueden causar una infección, irritación, quemaduras u otro daño en esa zona íntima.
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Si tu pareja te ama mucho, evita estos cinco pecados y que nunca los haga en tu zona íntima:
Introducirte objetos sólidos
Ya sabrás lo peligroso que resulta si tu pareja introduce alguna botella de vidrio en tu vagina y que al calor del momento se rompa. Con los objetos de plástico los recomendables son aquellos diseñados exclusivamente para el acto sexual. Ten en cuenta que con el tiempo y el uso, al plástico se le forman irregularidades donde se pueden acumular bacterias, así que siempre hay que lavarlos con agua y jabón después de usarlos.
Penetrarte si no está bien lubricada
Es posible que la fricción o los movimientos bruscos durante la relación sexual te lastimen la pared vaginal. Si sientes ardor, dolor y resequedad, difícilmente disfrutarás el momento, así que una de las cosas que no debes dejar que tu pareja te haga en la intimidad es que te lastime de esta forma.
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Introducir alimentos
Nunca dejes que tu pareja introduzca frutas o verduras en tu zona íntima. Cualquier alimento que toque tu vagina, sobre todo líquidos dulces como chocolate o crema batida, altera los niveles de pH vaginal debido al azúcar, lo que generaría infecciones por hongos.
Orinar en la vagina
La mayoría de hombres no pueden tener una erección y orinar al mismo tiempo porque el esfínter de la vejiga se cierra.
Hay hombres que son capaces de orinar cuando la erección no es tan fuerte o después de haber eyaculado, dejando a su pareja a expensas de una infección como la enfermedad pélvica inflamatoria (que de no ser tratada a tiempo puede causar infertilidad).
Tocarte con las manos sucias
Es recomendable que antes de introducir dedos en tu vagina, se lave las manos con jabón neutro. Además, debe cuidar la higiene de sus uñas, cuidando que no quede mugre debajo de ellas.