El tenerse lindos sobrenombres y apodos en una relación es más beneficioso de lo que piensas, aunque a algunas mujeres les parece ofensivo y molesto. Pero, te tenemos una buena noticia, los expertos en psicología lo avalan y aseguran que si tu pareja te habla con apodos, puede que sea el amor de tu vida.
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¿Quién lo dice?, el investigador del Departamento de Psicología de la Universidad Iberoamericana, Óscar Galicia. El aseguró que utilizar apodos como mi vida, mi amor, princesa, cielo, mi reina bella, entre otros, denotan afecto, confianza entre la pareja y cariño.
“Decirle al ser amado un sobrenombre es para dejar en claro que no eres cualquier persona, eres especial. Con esto se crea intimidad, armonía y una respuesta positiva en la relación”, aseguró el investigador Óscar Galicia.
Agregó además que “al hacer esto, las parejas cambian el significado de lo que eres, en términos de una relación, es decir, dejas de ser esa persona que todo mundo conoce para ser alguien más especial para mí”.
El experto aclaró que con este tema se debe ser cuidado, pues el uso de apodos ofensivos y calificativos denigrantes, “lejos de abonar cosas buenas a la relación, hacen todo lo contrario”.
Colocó como ejemplos los sobrenombres: gorda, vieja, mensa, fea resultan ser groseros y afectan la relación, además de disminuir el autoestima de las personas y lastimar.
“Con estos apodos se recalcan constantemente los errores y defectos de la otra persona. En este tipo de relaciones el amor pasa a segundo término y predomina la posesión, autoridad, dominio y violencia”, advirtió.