El sexo es una gran enciclopedia, un libro extenso con muchos capítulos. Así como existen posturas para una penetración profunda o para llegar al orgasmo, también hay movimientos sexuales que excitan no solo a los hombres, también a las mujeres. Dentro de esos movimientos de placer se encuentra la famosa spanking, también conocida como las nalgadas.
PUBLICIDAD
De acuerdo con una encuesta realizada por la compañía de juguetes Lovehoney, las nalgadas podrían ser la clave de una verdadera noche de placer y de pareja y, demás, podría ayudarte al alcanzar el tan anhelado orgasmo.
Los expertos entrevistaron a 4.500 personas, quienes hablaron de sus experiencias en la cama y de sus movimientos sexuales favoritos. Esto les permitió descubrir que el 70% de las mujeres y el 64% de los hombres se excitan más cuando en el acto sexual se incluye nalgadas.
Suena curioso, pero una palmadita en los glúteos durante el acto sexual acrecienta el placer. Esta palmada puede variar en intensidad dependiendo del momento. Además, lejos de causar dolor, se disfruta tanto o más que otros juegos de pareja.
Asimismo, la autora de Exhibitionism for the shy, Carol Queen, indicó que las mujeres podrían amar esta acción porque las “nalgadas estimulan terminaciones nerviosas de la vagina”.
“Debes tratar de atinarle a la carne o al músculo, no al hueso. Apunta a la parte inferior del trasero; esto involucrará más nervios y lo hará más agradable”, aseguró la experta.
Te presentamos otros beneficios de las nalgadas o spanking dentro del juego de la intimidad:
– Durante el sexo, el cerebro produce endorfinas, neurotransmisores encargados de generar sensaciones de bienestar. Al recibir nalgadas se activa un efecto analgésico: reducción del dolor y excitación juntas.
PUBLICIDAD
– Con las nalgadas el organismo también genera cortisol, un químico que se libera como respuesta al estrés. Lo que a su vez permite enfocarse solamente en el placer y olvidarse de aflicciones.
– Las nalgas están ubicadas al borde de la espina dorsal donde se encuentran la mayoría de los receptores de los nervios. Por lo que recibir un golpe en esa zona resulta muy placentero.
– A medida que más personas lo realizan, más se incrementan los deseos de probarlo.
– Las nalgadas dentro del sexo intensifican la relación entre el placer y el castigo. El solo hecho de que sepamos que las spanking están relacionadas con un castigo, y que aparezcan súbitamente en una situación de placer, resulta excitante.