Una de las enfermedades crónicas más peligrosas del mundo es la diabetes si no se trata correctamente. Dependiendo del tipo de diabetes que sea, debes inyectarte insulina diariamente o simplemente cuidarte con las comidas, disminuyendo el consumo de dulces y carbohidratos.
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El primer signo de alerta al que debes prestar atención es el nivel de tu glicemia. Este es el mayor indicativo de que alga pasa con tu organismo.
Síntomas de glicemia alta
Fatiga
Sentirse demasiado cansado, débil o fatigado son síntomas inespecíficos y también pueden ser signos de bajo nivel de azúcar en la sangre, explica la endocrinóloga Deena Adimoolam al portal SELF.
Dolores de cabeza
Los dolores de cabeza son increíblemente comunes, por lo que es útil saber con qué tipo de dolor de cabeza está lidiando (migrañas, por ejemplo). Sin embargo, cualquier nuevo dolor de cabeza crónico merece ser discutido con Tu médico.
Visión borrosa
El exceso de glucosa en la sangre puede terminar afectando la retina y causar una afección llamada retinopatía diabética. Como resultado, puede tener una visión borrosa.
Micción frecuente
Esa glucosa adicional también puede afectar tus riñones, que son responsables de eliminar el exceso de agua de su sangre para producir orina. Tener demasiada glucosa en la sangre puede dañar los vasos sanguíneos en los riñones, lo que hace que este proceso de filtración sea menos eficiente y hace que orines más.
Aumento de la sed
Según la doctora Adimoolam, sentir que necesitas beber más de lo habitual es un efecto secundario natural de orinar con más frecuencia.
Presta atención a estos síntomas y acude de inmediato al médico para que te haga los exámenes correspondiente y te dé un diagnóstico.