La mayoría de los adultos jóvenes de hoy usan demasiado su teléfono inteligente. Debido a que es muy común que las personas estén totalmente pegadas a sus teléfonos, puede ser difícil saber si su conexión a la tecnología en particular es motivo de preocupación.
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Aquí hay una manera de saberlo: según una nueva encuesta, las personas que se van a dormir con sus teléfonos tienden a mostrar una adicción a la tecnología peor que las que se acuestan sin ellos.
Un signo de la adicción a tu teléfono inteligente
La compañía de bienestar centrada en la tecnología BOLDFISH realizó una encuesta a más de 1,000 personas de veinte y treinta años y descubrió que casi el 80 por ciento de ellos se llevan sus teléfonos a la cama, gastando un promedio de 75 minutos en sus teléfonos antes de quedarse dormidos. Más del 70 por ciento de las personas que duermen con sus teléfonos en la cama con ellos revisan sus teléfonos al menos cada 15 minutos a lo largo del día.
En comparación con las personas que duermen sin tecnología, aquellos que llevan sus teléfonos a la cama tienden a usar sus teléfonos inteligentes con más frecuencia y llevan una vida más «centrada en teléfonos inteligentes».
Si eres una persona que tiende a dormir con tu teléfono cerca de tu cabeza, podría valer la pena trabajar en una desintoxicación digital. Hay muchas formas de hacerlo, pero un punto de partida es cambiar tus hábitos de sueño relacionados con la tecnología. Muchos expertos en bienestar recomiendan simplemente mantener tu teléfono (y otras tecnologías) fuera del dormitorio por completo.
Otra opción es probar el modo avión en la noche.