Nuestra autoestima comienza con nuestros pensamientos. Cambiar el chip negativo, nos ayuda a ganar perspectiva, a tomar conciencia de las partes que no nos gustan de nosotros mismos, a entender que las fallas son parte de nuestro propio progreso y que nuestro cuerpo y nuestra mente no tienen nada que ver con la de otros.
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Pero gracias a las redes sociales, la televisión y las revistas, nuestra mente ha sido «entrenada» para comparar constantemente nuestros cuerpos entre sí, haciéndonos creer que estamos lejos de ser perfectas.
De un momento a otro, convertimos nuestro cuerpo en un blanco de nuestras odiosas palabras; de comentarios llenos de decepción y frustración y eso termina por derribarnos.
Es momento de entender que nuestro cuerpo es nuestro mejor amigo, agradecerle por toda nuestra vida, nporque nos lleva, nos sostiene y nos protege. Es momento de darle un respiro, de aprovechar el cambio de año para empezar de nuevo. Es momento de creernos lo mucho que valemos y que nuestro cuerpo merece todo el amor del universo, empezando por nuestro universo interno.
Aquí te dejo una lista de propósitos que debes hacerte para comenzar a ver tu cuerpo con amor este 2019.
1. Deja de culpar a tu cuerpo por las cosas malas en tu vida.
No es culpa de tu cuerpo. En lugar de eso, di: «Gracias, cuerpo, por estar conmigo en este viaje».
2. Deja de permitir que un comentario ajeno determine cómo te sientes acerca de ti misma.
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Esa persona probablemente no te estaba juzgando, ni siquiera te estaba viendo. La realidad es que te estás juzgando a ti misma. Cambia el juego y dile a tu cuerpo: «Te perdono. Te envío amor».
3. Deja de permitir que los números en la báscula o el tamaño de tu pantalón lo definan.
Eres más que cualquier número. Lo que más importa es cómo te sientes, no cómo te ves. No temas a verte desnuda frente al espejo ni a usar esos pantalones ajustados o ese vestido estampado sólo porque otros dicen que «no va con tu cuerpo».
4. Deja de juzgarte a ti misma por lo que no puedes hacer y empieza a celebrar lo que sí puedes.
No seas tan dura contigo misma. Los límites están en tu mente. Comienza a decir «yo puedo» y verás todo aquello de lo que eres capaz de hacer que otros con «mejor cuerpo» no pueden. Deja de pensar que la vida está dividida en «actividades para gordos, flacos, morenos, rubios, altos y bajos».
5. Deja esperar a alcanzar una meta para disfrutar tu cuerpo.
Está bien ponerte metas sobre lo que quieres lograr pero tu vida está sucediendo ahora. Puedes elegir odiarte o amarte a ti misma. Escoge el amor, te será más fácil lograr lo que te propones. Disfruta tu cuerpo y verás cómo se abren caminos para llegar a donde quieres.
