Por María Mercedes Castro, INN Health Coach
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Aunque no lo hayas imaginado, consumir frutos secos es una manera eficiente de equilibrar tu dieta diaria con vitaminas, proteínas y demás nutrientes.
Son ricos en grasas saludables y proteínas, por lo que pueden ser un reemplazo de la proteína animal, con excelentes resultados. Tienen pocos hidratos de carbono simples y estimulan la quema de grasa, pues al ser ricos en fibras, dan una sensación de saciedad consumiendo pequeñas dosis.
Un estudio publicado por el New England Journal of Medicine indicó que si consumimos una dieta con una cantidad moderada de frutos secos podremos reducir enfermedades cardiovasculares en un 29 % y contraer cualquier tipo de cáncer en un 11 % menos. Además, son aliados en la reducción del colesterol malo y elevan el colesterol bueno.
Los frutos secos de cáscara dura (almendras, avellanas, nueces, pipas, pistachos y piñones) pueden ayudarte a perder peso: Dan saciedad y calman el hambre fácilmente.
Ayudan a comer menos, no solo porque tienes menos hambre por más tiempo, sino que por su cantidad de fibra y exigencia de masticación te permiten controlar la cantidad que comes.
Mejoran la calidad nutricional de tus platos porque ayudan en la tarea de comer alimentos más saludables si no estás acostumbrada.
Aportan grasas y buenos nutrientes para gozar de una dieta equilibrada.
¿Cuáles y cuántos debes comer?
A pesar de estar llenos de maravillosas cualidades para bajar de peso, debes recordar que son productos muy calóricos, entonces para una dieta de reducción de peso es necesario controlar la cantidad que comes.
Especialistas indican que consumir 30 gramos o un puñado de frutos secos al día o la mayoría de los días es suficiente para lograr los objetivos deseados. Esa cantidad representan unas 200 calorías.
Los frutos secos más recomendados para bajar de peso y que encontramos en nuestro país son avellanas, almendras, nueces, anacardos, castañas y maní.
Te sugiero que empieces el día con un batido al que le pongas frutos secos, de esta manera estarás más satisfecha durante toda la mañana y llegarás al almuerzo con un apetito controlado.
Prueba esta receta sencilla con frutos secos
Para prepararlo:
2 tazas de espinaca
2 tazas de leche de almendras
1 manzana
½ taza de avena
1 cucharada de aceite de coco
1/2 cucharadita de canela en polvo que ayuda a acelerar el metabolismo.
¡Mezcla todo y listo!
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