Cuando pensamos en Miss Mundo, es imposible no proyectar en la cabeza la imagen de mujeres altas, esbeltas, con blanca sonrisa y destilando gracia y simpatía a cada paso. Mujeres de piel tersa, piernas y brazos torneados. Sin embargo, en los últimos años se le ha dado oportunidad a un nuevo estereotipo de mujer, más real y con rasgos con los que cualquiera podría sentirse identificada, alejando el concepto de perfección de aquellas mujeres con medidas ilusorias.
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En esta ocasión, Chile ha dado un salto inmenso en cuanto a diversidad y demostró que una «incapacidad» no es obstáculo para cumplir el sueño de desfilar por una pasarela y coronarse como reina de belleza.
Por ello, María Paz Díaz, una tenista paralímpica chilena, debutará en Miss WheelChair World 2017 (Miss Mundo en Silla de Ruedas)
María tuvo un desafortunado accidente en 2007, cuando una bala perdida alcanzó el auto en que ella viajaba, hiriéndola gravemente por el colon y la medula espinal, lo que hizo que nunca más pudiera caminar.
El incidente cambió su vida por completo pues además de que afectó su carrera, fue un golpe para su autoestima. Sin embargo, tras años de terapia y voluntad propia, regresó a las canchas y ahora pondrá en alto el verdadero significado de belleza.
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Por otro lado, Paula Mirada también estará representando a Chile en el certámen. En 2011 sufrió un accidente automovilístico en Viña del Mar, quedando tetrapléjica. En el accidente, ella fue la única que recibió todo el impacto, lo cual cambió su vida por completo. Al igual que María y muchas otras mujeres con esta condición, Paula aprendió a sobrellevar la adversidad y hoy es una de las mujeres más bellas no sólo por su físico, sino por su espíritu y su fuerza de voluntad que la sostienen, más allá de una silla de ruedas.
