10 hábitos que debes evitar si eres jefa

Por: Alex Giardini

Si estás en una posición de liderazgo, tu trabajo va a salir mal si no olvidas los malos hábitos laborales. Ahora que tienes un rol más grande, todos te estarán viendo. Y mientras el trabajo puede venir con más autoridad y libertad, tú y sólo tú, serás la responsable.

¿Cómo pasas con éxito de empleada a jefa?

1. Planea tu día/semana

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Si eres jefa y tus prioridades no son suficientemente claras, no sólo se irán atrasando, tú también te quedarás atrás. Como líder, siempre tienes que estar un paso adelante.

2. Responde emails en momentos específicos

Ahora que eres líder tu bandeja de entrada estará más llena. A menos que estés en ventas, estar pegada a tu correo respondiendo emails el día entero sólo te hará menos productiva. Es bueno estar al tanto de todo, pero no en vez de otras prioridades. Entre tarea y tarea toma el tiempo para revisar tu bandeja de entrada, pero evita interrumpir otras actividades. 

3. Comunícate

Si estás tomando las riendas de una compañía, asegúrate de comunicarte propiamente con tus socios, clientes y empleados si quieres ganarte su respeto y confianza. 

4. Sé flexible

Ajustar tu rutina diaria puede ser positivo, pero si estás trabajando en un ambiente de mucha presión, no dejes que el cambio te tome desprevenida. Los jefes deben poder ajustarse velozmente y con seguridad a lo inesperado. 

5. Toma descansos

En serio, trabajar nueve horas seguidas sin comer o salir a caminar te convertirá más en un Frankenstein que en el heroína de la empresa. La presión constante te puede destruir, así que deja que tu psique descanse  y tómate unos minutos para respirar. Tu productividad se beneficiará.

6. No llegues tarde

Esto daña tu imagen y quienes trabajan contigo dejarán de tomarte en serio –en particular si vas a una junta o estás representando a tu empresa en algún lugar.

7. Deja de procrastinar

No puedes sentarte sólo estar pegada a Facebook todo el día si tienes mucho trabajo que hacer. Esta bien que como jefa delegues algunas responsabilidades, pero no esperes que tu equipo haga todo el trabajo por ti mientras tú disimulas que trabajas. Si eres líder es por una razón y debes demostrarlo, así que ¡a trabajar!

8. Toma decisiones firmes

Claro, la flexibilidad es importante, pero hay momentos en que las decisiones deben ser inamovibles. Jugar al abogado del diablo no va a funcionar si necesitas despedir a alguien o hacer un cambio grande. Sé segura de ti misma y tus decisiones.

9. Que no te de miedo decir ‘no’

Esta pequeña palabra comúnmente tiene mala reputación; sin embargo, si eres el líder, decir ‘no’ en momentos adecuados es crucial. Recuerda: tampoco debes usarla para todo.

10. Deja el multitasking

Aunque parezca algo impresionante, no es eficiente ni productivo. Hacer varias cosas a la vez hace que tu mente se confunda, por lo tanto, al final tardarás mucho más en terminar una tarea.

Un buen jefe conoce sus debilidades y trabaja en ellas todo el tiempo. Sólo porque estás en una posición de poder, no significa que debes dejar de mejorar. Tal vez tome un poco de tiempo eliminar algunos rasgos, pero te beneficiará a ti, a tus empleados y al negocio a largo plazo. 

¡Suerte y mucho éxito!