Si me han leído hace un rato o hace poco, hay algo que tienen claro de mí, y es que con la medicina alópata tengo súper poca onda, malas experiencias y pocas soluciones.
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Mis razones son variadas, que independiente que puedo entender que el sistema de salud afecta mucho la relación Médico/paciente (¿no les llama la atención que se nos llame “paciente”? ¿cómo si tuviéramos que quedarnos quietos?) que está condicionada por el factor dinero de forma tan grosera y asquerosa.
…”En medicina oriental no es necesario conocer la causa ni el nombre de la enfermedad para curarla, sino que el énfasis se pone en los síntomas que presenta el paciente. Los síntomas son las manifestaciones de la acción de la enfermedad en el cuerpo y la reacción de este, es decir, son una alarma automática que nos indica la existencia de una enfermedad y su naturaleza para poder curarla. Según el síntoma que aparezca se decide el método de curación a aplicar. La perfecta curación depende del estudio y la experiencia del médico.Otro aspecto diferenciador se encuentra en aquella máxima ancestral de la medicina oriental que dice: “nada que no haya sido probado previamente en uno mismo debe ser aplicado a otros”.
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Todos los médicos orientales tradicionales siempre han ensayado las medicinas en sus propios cuerpos antes de administrarlas a pacientes, como todo acupuntor debe pinchar su cuerpo antes de poner una aguja en el ajeno. Por ello, ninguna de estas medicinas causa problemas ni tiene efectos secundarios. Así desde hace 5.000 años. Llevado a nuestra medicina moderna, sería difícil encontrar investigadores y médicos que sobrevivieran a sus propios tratamientos de quimioterapia y radioterapia…”
Es imposible desconocer los avances científicos que la medicina tradicional realiza y son un aporte, pero personalmente creo mil veces más importante, la persona y sentimientos, el por qué de las enfermedades y revertir desde la raíz y no sólo parchar o medicar a destajo.
También creo que se pueden complementar, no soy taaaaaan radical tampoco, si me resfrío me tomo su pastilla, pero creo que para lo que se tiende a transformar crónico se debe tratar de otra forma y en eso la medicina oriental a mí me hace mucho más sentido.
Mucha gente que me pregunta el cómo llegue a no tener Disautonomía y cuando respondo que fue a través de la Acupuntura y el reiki, no es poca la que no me cree e incluso pone en duda que alguna vez la haya tenido, lo cual me produce un poco de rabia, por que en su momento perdí muchas cosas gracias a esta enfermedad, la pase súper mal y si cuento mi experiencia, es sólo por si a alguna persona le hace sentido el camino que yo tome, pero jamás trato de instalarlo como verdad absoluta.
Yo entiendo que cambiar lo que uno conoce puede generar mucha resistencia y también entiendo que cuando uno dice que las enfermedades son producto de emociones desbordadas, no atendidas, que las somatiza el cuerpo; lo primero que se piensa ¿yo estoy inventando esto? ¿yo lo estoy provocando?…osea…¿es mentira?…Así nos han enseñado generalmente a tratar los sentimientos de forma peyorativa, como si enfermarse por tener mucha pena fuera un gran signo de debilidad. Muchas veces cuando un doctor en vez de diagnosticarnos correctamente de disautonomía, nos derivó al psiquiatra o psicólogo, nosotras nos enojamos por que nuestro padecimiento es súper físico y concreto, aunque para el resto no lo parezca.
Ni lo uno, ni lo otro esta mal. Yo solo le muestro una puerta y la invito a mirar.
¿Cómo sabe si le va bien y encuentra bienestar?