Una de las decisiones más importantes al establecer el itinerario de la boda es si novio y novia se verán antes de la ceremonia para un encuentro privado, o si destinarán ese momento para cuando ambos se vean por primera vez en el altar.
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Siendo fotógrafa, es la pregunta que más me hacen las novias para establecer horarios y delimitar lo que sucederá durante ese día.
Con el propósito de simplificar lo que parecería una decisión muy complicada, les preparé una lista de pros y contras a considerar para armar sus itinerarios.
Al final, todo resulta de lo que sea más importante para ustedes como pareja y de hablarlo bien con los proveedores que puedan estar involucrados (maquillaje, flores, coordinación, fotografía y video) 🙂
Pros de Ver a tu novio antes de la ceremonia.
- Puedes tener un encuentro privado (sin invitados ni familiares) en donde lo más importante sea lo que sucede entre ustedes.
- Puedes besarlo sin fin y aprovechar y verlo por todos los ángulos sin que tengas un padre u oficiante esperándote.
- Alargas el tiempo de tu boda, puesto que destinarías tiempos especiales para verlo antes de todo lo que sucederá.
- Puedes organizar que tu sesión de fotos sea inmediatamente después de tu encuentro, lo cual garantiza que tu peinado y maquillaje estén lo más frescos posibles para las fotografías.
- No tendrás la presión de mantenerte “perfecta” y podrás derramar algunas lagrimitas, o incluso él se sentirá más libre de hacerlo.
Contras de Ver a tu novio antes de la ceremonia:
- No es tan romántico como esperar a ver su reacción en el altar mientras te ve caminando por el pasillo.
- Pierdes la oportunidad de tener testigos que se emocionen con lo que ocurre entre ustedes.
- Si lo ves antes y te tomas las fotografías enseguida, puede que tu vestido no llegue tan limpio a la ceremonia.
- Le quitas algo de protagonismo a la ceremonia, al convertirla en otro procedimiento más.
- Puedes llegar algo cansada o acalorada a la ceremonia por el traqueteo que suceda antes.
Recuerda, lo más importante es que tú decidas qué es lo más importante para ambos y que toda tu boda transcurra como siempre te la imaginaste. No hay decisiones correctas o incorrectas, sino sólo las que son más adecuadas para ese día tan especial.