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Todas las mujeres soñamos con tener una vida sexual plena llena de cariño y éxito. Sin embrago, no podemos negar que cometemos algunos pecados y es que debido a nuestra personalidad nunca faltará un momento para estropear las situaciones más claras.
La reconocida sexóloga argentina, Alessandra Rampolla, reconoce algunos de estos errores que te pueden costar caro, quizás no tu relación pero si te harán pasar un mal rato, aunque el que más sufrirá será tu amante.
Según la especialista, uno de los pecados es avergonzarse de nuestro cuerpo ya que muchas veces le decimos a nuestra pareja que no nos toque en algún lugar específico a veces porque tienes un rollito u otros motivos pero eso lo único que hace es alejar a tu amante de ti y tu realidad. Tampoco vas a exhibirte todo el tiempo ya que según Alessandra los hombres se acostumbran y ya no tendrán el mismo entusiasmo al mirar algo tan conocido. La idea es nunca perder la sensualidad.
Otro punto remarcado es el de “horrorizarnos ante nuevas propuestas”. Como hemos hablado en muchas ocasiones lo peor en una relación y especialmente en el sexo es la rutina, por eso si nuestra pareja quiere experimentar y quizás intentar una nueva posición ¡intentémoslo! No sabes si eso te podría gustar, al final en las relaciones de pareja una de las claves es sorprender.
Fingir orgasmos sí que es un pecado porque implica mentir, la comunicación es fundamental y puede que si no estás llegando al clímax estás teniendo otros problemas que te lo impiden. Es muy bueno decirle a tu pareja qué es lo que te gusta y lo que no, cuáles son tus caricias preferidas, etc. Pero no le des órdenes sino que tienes que hablarle con voz sensual para que no crea que lo estás exigiendo, sino sugiriendo.
Criticar su rendimiento debería ser ilegal, con este tipo de comentarios sarcásticos lo único que lograrás es que tu pareja no se entusiasme a tener sexo contigo, ya que tendrás miedo a la desaprobación y burla en caso de cometer un error. Ese tipo de presiones no sirven en el sexo, al contrario lo estropean.
