¿Cada cuánto puede alguien entrar así sin más,al evento internacional más famoso de la industria de la moda y qué se necesita para codearse con toda la gente vip?
El periodista británico Oobah Butler lo sabe muy bien, y así quedó demostrado luego de haber timado a organizadores, productores, seguridad y celebrities de la Semana de la Moda en París.
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La historia no ha dejado de causar polémica en las redes y entre los conocedores de estos grandes eventos, hasta el punto de hacerse viral incluso un año despúes de la aventura.
Esto gracias a que recientemente su marca ficticia ha roto esquemas siendo súper acogida por miles y llegando a engañas a los más expertos, como la mismísima modelo y presentadora de televisión, Alexa Chung.
La meta de este periodista fue demostrar que llegar a ser una marca ‘in’depende de ciertos factores ligados a la oportunidad y el ventajismo, además de burlar a la industria de la moda, o como diría Butler,
» Demostrar que la industria es lo suficientemente falsa para ser engañada por un hombre falso».
El plan paso a paso
Oobah Butler siempre ha disfrutado de comprar en mercados de segunda mano, y cierto día una marca impresa en un pantalón llamó su atención, se trataba de ‘Georgio Peviani’.
De inmediato el plan se puso en marcha y desde ese día adoptó aquél nombre que sonaba a alta costura italiana.
Con varios outfits de su ahora casa ficticia de modas, se embarcó en la aventura de viajar a París, con una imagen publicitaria en construcción que incluía website, trajetas de presentación y hasta un ‘paparapzzi’ que lo seguía a todas partes.
Con suerte de estar en los lugares indicados y la actitud de sobra, Butler, ahora en el papel de Georgio Pevani logró su credencial en el evento, la entrada a fiestas privadas, desfiles y hasta la admiración de influencers, modelos, la prensa y hasta uno que otro experimentado diseñador.