Durante el tiroteo del pasado domingo en una iglesia de Texas, una mujer se usó a sí misma como un escudo para proteger a sus cuatro hijos de las balas. Aunque ella perdió la vida, logró salvar a su pequeño de cinco años y a una de sus hijas.
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De acuerdo con lo relatado por un amigo de la familia, Joann Ward empujó a su hija de 9 años, Rihanna, al suelo inmediatamente después de que el hombre comenzara a disparar dentro de la Primera Iglesia Bautista en Sutherland Springs. Posteriormente, ella abrazó a sus otros tres hijos.
No me dispararon porque yo estaba escondida y mi mamá cubría a Emily, Ryland y Brooke», relató Rihanna a su familia, indica en un post de Facebook Vonda Greek Smith, el amigo de la familia.
Durante el tiroteo 26 personas fallecieron, Joann y su hija Brooke, de cinco años, estaban entre quienes fallecieron en el lugar. Emily, de siete, perdió la vida en el hospital.
El hijo de Ward, Ryland, de cinco años, recibió cinco disparos y se encontraba en estado crítico después de una cirugía, informó un familiar que creó una cuenta para recaudar dinero para la familia.
Ryland sobrevivió a múltiples heridas de bala, tuvo varias cirugías extensas y tendrá un largo camino para recuperarse totalmente», reveló Smith en su posteo.
En el momento del tiroteo, el esposo de Joann y padre de los menores se encontraba en casa durmiendo, esto debido a que había pasado la noche trabajando. Ahora, está pasando por el dolor de haber perdido a tres amados miembros de su familia.