Wellness

PNL Cuántica: Una herramienta para ser la mejor versión de nosotros mismos

Ahondando en las conexiones familiares y realizando movimientos físicos, este breve tratamiento sirve para terminar con miedos, pensamientos limitantes y conductas que no aportan a nuestra vida.

Por: Carolina Palma Fuentealba

PUBLICIDAD

¿Es posible vivir hoy, momento a momento, en conexión con los demás, en calma y paz interior? ¿Se pueden sanar antiguos dolores con nuestros padres o hijos, y volvernos la mejor versión de nosotros mismos, aún en momentos difíciles? Eso se pregunta Jessica Riberi, sicóloga de la Universidad Católica, máster trainner en Programación Neurolingüística (PNL) y autora del libro «Vínculos de vida», de Ediciones B. ¿La respuesta? Sí se puede.

        DESCUBRE MÁS

  1. La ciencia revela que ser ‘multitask’ no es sinónimo de ser una persona productiva
  2. 10 consejos de Gandhi para ganar una discusión sin levantar los puños
  3. La ‘Regla del Minuto’: el método para combatir la pereza y motivarte en la vida

 

Dentro de los caminos que encontró está principalmente la PNL Cuántica, Arquetipos, y Constelaciones Familiares. Con ejemplos claros la autora indica los paisajes que podemos recorrer si queremos estar bien. Felices, la mayor parte del tiempo. «La PNL y las Constelaciones son enfoques estratégicos. Terapias con estos sistemas no superan las 12 sesiones, porque se identifica rápidamente el núcleo que hay que resolver para que el sistema se reorganice», explica Jessica.

LIDERAR
Las mujeres tenemos distintos roles, lideramos procesos en diferentes ámbitos. Por lo tanto, es fundamental manejar la tensión, la incertidumbre, la frustración. La PNL Cuántica entrega un modelo de trabajo que apunta a los nuevos desarrollos, para mantener un estado centrado de consciencia, preservar la calma frente a lo difícil. Todo para mantener la percepción global de lo que pasa realmente.
«Existen niveles de intervención. A veces trabajas con la persona en relación a su propia historia, que permite vivir la vida con todos los vaivenes. La PNL permite intervenir a nivel de creencias, habilidades, conducta. Transforma todos los recursos que el paciente tiene. A veces hay situaciones en el pasado que imprimieron huellas que nos limitan y nos sacan de nuestra zona de excelencia, que nos llevan a situaciones donde entra otro tipo de pensamiento, pensamientos virulentos. ´No puedo´, ´no soy capaz´, ´no me lo merezco´», ejemplifica la sicóloga.

ANCESTROS
Cuando se integra la PNL con las Constelaciones Familiares, aumentan los resultados. Con la PNL la persona logra manejar el problema, pero éste no se va. Cuando se incorporan las Constelaciones se muestra la conexión de tus problemas con la familia de origen. «Hay un campo energético emocional que viene desde tus ancestros que puede implicar ocho generaciones. La PNL permite que se instale la aceptación como punto de partida en la vida. Eso cambia el campo energético que da forma a tu comportamiento», asegura la autora.

Por ejemplo, a principios del siglo pasado, había una mortalidad infantil altísima. Hay muchas mujeres que perdieron hijos por enfermedades, también existía mucha pobreza y abusos sexuales. Todo genera impacto en la descendencia. «A veces me encuentro con hombres con poca fuerza vital, frágiles, que les cuesta ahondar en sus afectos. De alguna manera ellos rechazan lo masculino porque lo masculino está unido al abuso de mujeres. Como hoy las respetan, no quieren ser hombres. También pueden mostrarse muy lógicos, pura cabeza, porque no pueden conectarse a nada emocional. Cuando entran al campo emocional, se conectan con la ira», explica Jessica.

EL SISTEMA FAMILIAR TE DEFINE
Cuando eres parte de un sistema familiar, éste te define, de alguna forma. Por lo mismo, cuando rechazas el destino de tus padres, rechazas también tu vida misma, tus relaciones. «Cuando aceptas a tu padre, tu madre, tu historia, instalas la aceptación como punto de origen en la vida. Eso te abre otra cualidad de fuerzas arquetípicas. Cuando rechazas la vida, aparecen los niños heridos, la víctima, el victimario, el cuidador. Cuando abres la puerta a mirar la vida en compasión, ves todo con perspectiva. La aceptación es muy importante. Si uno no acepta al otro tal cual es, no lo ama».

Si eres una mujer que rechaza a su madre, tanto porque no te gusta como porque te haces cargo de ella, conviene analizarlo. «Cuando alguien se hace cargo de su madre, se sale del rol de hija. Hay distintas formas de rechazo. Eso cortará la conexión a lo femenino, se podrá ser mamá del hombre, pero no mujer. Si se rechaza al padre, se rechaza la primera conexión a lo masculino, por lo mismo, se vuelve difícil que entre un hombre a la vida. Solo llegan niños o figuras paternas».

ERROR: ESPÍRITU MATERNAL
En nuestra cultura, en general se relaciona a nuestro género con actitudes maternales; incluso a veces actuamos como madre de nuestros padres. ¿Qué pasa en ese caso? «Se instala un guión de pasado que no les permite tener vida propia, y se perpetúa el dolor. De alguna manera cuando uno es madre de sus padres tiene menos disponibilidad de ser madre de sus hijos. Si tiene hijos, reciben menos madre. Con estas terapias se devela la verdad, uno entiende de dónde nacen los problemas».

MUJERES GUERRERAS
Es cierto que en el siglo pasado predominaba una imagen femenina vulnerable, pasiva, mientras que el hombre llevaba la familia, pero vinieron generaciones luchadoras. Riberi recuerda que la generación de mujeres que ahora bordean los 60 años se revelaron frente a esa postura. «Ellas abrieron el camino para que nosotras trabajáramos y tomáramos decisiones. Las mujeres guerreras rechazaron todo lo del hogar, entonces los hijos de esa generación también tuvieron déficit. Ser hijo hombre de esa generación es difícil, porque son mujeres guerreras, con poca conexión emocional».

LA PAREJA
En términos de pareja hay un movimiento también. «En la generación que ahora bordean los 80 años, las mujeres estaban inmersas en el dolor de la muerte, por sus hijos muertos, mientras el hombre daba batalla para salir adelante. El vínculo de pareja era difícil. Si uno ve a las parejas de 60 años, las mujeres se empoderaron, salió la pastilla anticonceptiva. En ese espacio los hombres las miraban, pero ellas no los miraban porque estaban luchando por sus derechos. Actualmente, la generación de 30 años se miran, establecen contacto».

TRISTEZA INFUNDADA
«Había una mujer que tenía una pena enorme, que no lograba, después de pasar por diversos especialistas, saber de dónde venía. Con Constelaciones se dio cuenta que cuidaba a su mamá. ¿Pero quién debería cuidarla realmente? Su propia madre. Por lo tanto, se identificaba con el campo energético de la abuela. Imagínate una abuela que había perdido a su madre temprano y a ocho hijos. Claramente el destino de la abuela estaba cargado de dolor. Al estar identificada con ella, entra en el campo de dolor de la abuela, ahí estaba su base de dolor. Se necesitaba un camino de retorno, volver a ser hija de su madre», explica Jessica, para que relacionemos nuestros problemas con los ancestros.

ACEPTAR EL PASADO
En definitiva, uno tiene que aceptar el pasado de la familia tal cual fue. Si la abuela sufrió, se puede ver la fortaleza de esa mujer, que siguió viviendo, haciendo familia. «De esa forma sentirá orgullo, porque son mujeres que siguieron adelante. Uno vuelve a la humildad, porque te das cuenta que no puedes transformar el pasado. La decisión de salvar a los padres de su vida es una decisión infantil, mágica. Como adulto, uno toma consciencia de su gran fortaleza, ve las cosas tal cual son».

MOVIMIENTOS CORPORALES
En Constelaciones se realizan movimientos físicos, actos «sico-mágicos». ¿Por qué? «Cuando uno hace ese trabajo puede intervenir a nivel de conducta, de desarrollar habilidades, de transformar creencias. Con estas terapias estás interviniendo en el vínculo de la persona con la vida, el vínculo es energético. La conexión energética se da a través del cuerpo, no es mental. De hecho, en los nuevos desarrollos de constelaciones, Constelaciones Cuánticas, es todo en silencio, y se trabaja con movimientos corporales para sanar a la persona y el sistema familiar».

Tags

Lo Último