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Josefa Errázuriz: antes y después de la inesperada muerte de su marido

La candidata a alcaldesa de Providencia suspendió momentáneamente sus actividades de campaña tras el inesperado fallecimiento de su marido, el arquitecto Lorenzo Brugnoli. Días antes, Josefa Errázuriz conversó con Revista Mujeres sobre su candidatura, una de las que debuta en estas elecciones municipales.

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Josefa Errázuriz suspendió sus actividades de campaña

La tarde del martes 16 de octubre, Josefa Errázuriz, candidata a alcaldesa de Providencia, sufrió un duro golpe que la obligó a suspender momentáneamente sus actividades de campaña: su marido, el arquitecto Lorenzo Brugnoli, falleció a causa de un paro cardiaco tras someterse a una intervención programada, en la Clínica Santa María. Cientos de personas, incluido el actual alcalde de Providencia, Cristián Labbé, manifestaron su pesar por el dolorso momento que vive la candidata, una de las que debuta, sin background político, en estas elecciones municipales 2012.

Días antes de la pérdida de su marido, Josefa Errázuriz conversó con Revista Mujeres sobre su candidatura:

Es David contra Goliat, o así al menos se veía su candidatura a alcaldesa de Providencia cuando recién inició este camino en la política. Josefa quiere sacar de la municipalidad al histórico alcalde de Providencia, Cristián Labbé, carrera que comenzó cuando en mayo de este año se alzó con el triunfo en las elecciones primarias de la comuna, organizadas por la oposición a Labbé.

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Se considera políticamente independiente, aunque tiene un pasado familiar conservador y de derecha: es hija del matrimonio conformado por Octavio Errázuriz Letelier y Virginia Guilisasti Tagle, y hermana del embajador chileno en Estados Unidos entre 1989 y 1990, Octavio Letelier. Estudió en el Villa María Academy de Santiago, y luego cursó la carrera de Sociología en la Universidad de Chile.

«Nací y me crié en esta comuna, soy dirigente vecinal desde hace mas de 20 años, y cuando me retiré de mi trabajo activo en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud),  me comprometí que iba a trabajar por los temas que me apasionaban, como el patrimonio y la participación ciudadana. Fue así como me di cuenta que a los vecinos no se les escuchaba, y los verdaderos dueños de la comuna no eran ellos».

Pese a que su contendor ha ganado históricamente las elecciones desde 1996, está confiada y tiene la convicción que sus vecinos la apoyarán, ya que fue por ellos que llegó hasta donde hoy está. «Le entregamos al alcalde el resultado de un taller que mostraba cuáles eran los sueños de la gente de la comuna, y quedó en contestarnos y decirnos su opinión. Eso fue en enero, y hasta hoy no hemos recibido respuesta. Fue así como formamos Providencia Participa y surgió la primaria ampliada. Esta comuna ha sido abandonada por el alcalde, que hoy se preocupa de los temas internacionales y no de los vecinos».

Su programa tiene 114 medidas específicas que son conocidas por los electores, pero sabe que el alcalde Labbé tiene un voto duro de la gente más conservadora. ¿Su carta bajo el brazo? Los nuevos electores, que aumentaron la plantilla de posible votantes a 150 mil, quienes tienen otra visión de lo que quieren y no quieren en su comuna.

¿Lo más difícil de su campaña? Si duda el impacto de hacerse conocida y de relacionarse con los medios de comunicación. «El trabajo de calle no me asusta, me encanta. Providencia nunca había sido emblemática, pero desde que los propios ciudadanos levantamos esta alternativa tan interesante estamos en la mira, y es muy difícil pasar de ser un «NN» a una figura pública. Yo no hago política, no vengo de los partidos políticos».

Por esto mismo le afectó la situación vivida hace un par de semanas, cuando fue entrevistada en CNN y, al ser consultada por el matrimonio homosexual, respondió que no era partidaria pero sí de la vida en común en pareja, declaraciones que le costaron el rechazo inmediato de muchos de sus posibles votantes. «Me equivoqué en CNN, y eso me ha costado. Pero ya estoy acostumbrada, y más que un tema doloroso es solamente que te equivocaste, y no me gusta equivocarme porque soy bastante perfeccionista. El tema fue subsanado y ahora ellos (movimiento gay) apoyan irrestrictamente mi campaña».

Macarena Bezanilla: otra candidata debutante con fuerte apoyo popular

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La joven candidata y su familia

Tiene 35 años y cuatro hijos, los mismos que salen con ella a recorrer las calles para hacer campaña. «La de 8 años sale a entregar volantes, y la paran más que a mí», dice orgullosa Macarena Bezanilla, candidata a concejala por la comuna de Vitacura que en poco tiempo ha ganado una gran cantidad de seguidores, por lo que está confiada para la elección del próximo 28 de octubre.

Lo suyo es el servicio público desde pequeña; en su época de estudiante trabajaba en escuelas de escasos recursos, y cuando su marido ingresó a la política fue aún mayor su participación recorriendo las calles y ayudando a la gente en comunas como Lo Espejo y Pedro Aguirre Cerda, distrito de donde es diputado su marido, el Udi XXX.

¿Cómo llegaste a ser candidata?

«La verdad es que fue una invitación de Cristián Monckeberg y Raúl Torrealba (actual alcalde). Ellos vieron el trabajo que hacía en el distrito de mi marido, y me fueron a buscar para hacer un contacto más directo entre la gente y la municipalidad. Allá estaba encargada de toda la parte social, y en el fondo se trata de armar un poco lo mismo acá, aunque tomando en cuenta que las necesidades son totalmente distintas; en Vitacura sólo un sector de los habitantes tiene los problemas de allá, pero con ellos quiero trabajar».

Sobre todo le interesa enfocarse en el trabajo con los adultos mayores, esa gente que lleva décadas viviendo en Vitacura, que ahora están solos y tienen muchas necesidades. «Pero también tengo proyectos para trabajar en seguridad pública, Puntos Limpios, ciclovías, y siempre tratando de ayudar a las personas».

«Estamos felices, porque hemos trabajado un montón y tenemos muy buena acogida entre la gente. Nos han atendido muy bien, y además encuentro que trabajar en esta comuna es una escuela increíble; contar con un apoyo tan fuerte sirve para avanzar».

Por el momento está enfocada en salir electa concejal, y no ha pensado en cómo seguirá su carrera en la política. Además debe aprender a sobrellevar una serie de cosas nuevas, como la exposición en los medios de comunicación y ser conocida por la gente, algo que en un principio le impactó y hasta atemorizó. «Más que los medios de comunicación, me dio como crisis de pánico o pánico escénico ver ‘las palomas’ y los letreros con mi imagen por todos lados, y no se me pasó en varios días. Y después ver todo roto y la tontera de que gente sale a destruir los letreros… Es súper raro verte en todas las esquinas, porque soy una persona ultra piola y no lo dimensioné en un principio, nunca lo pensé, pero ahora lo asumí y me rio cuando me veo en las calles con dibujitos en la cara».

Sus cuatro hijos están «súper acostumbrados a ver al papá primero y luego a mí, trabajar mucho, salir a las calles y hacer una labor que no es muy común». Sin embargo, en este periodo han vivido un cambio más profundo; la mamá no está mucho en la casa, ya no hace las tareas con ellos. «Pero se lo han tomado bien, incluso me acompañan en el puerta a puerta y todos se meten a Facebook y comentan. La Ema, que tiene ocho, salió conmigo a los semáforos y le abrieron la ventana mucho más que a mí», dice esta mamá chocha.

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