Por redacción nueva Mujer
PUBLICIDAD
Lindsay Lohan creció de la mano de una generación que la identificaba a la perfección por su papel en Juego de Gemelas, película de Disney que se convirtió en un clásico para decenas de niños que se imaginaban en la misma situación. Su angelical rostro siguió de manera discreta por Hollywood hasta protagonizar ‘Chicas Pesadas’ y alguna otras películas, pero el éxito y la popularidad fueron discretos. En su lugar, los escándalos se hicieorn más comunes y desde entonces, la carrera de la guapa actriz no ha logrado ser la misma.
MÁS: Cuando las chicas Disney perdieron su inocencia y mostraron un poco más
Recomendados:
Señora Millennial: así se transformaron las nómadas experienciales
Lecciones sobre amor (y sexo) que aprendimos de Samantha Jones por las que la vamos a extrañar
Cómo apoyar a un familiar que padece cáncer de mama
Acusada de conducir en estado de ebriedad
2007 no fue un buen año para la carrera de la actriz, fue detenida en dos ocasiones por conducir ebria, según relata el Daily Mail, fue acusada de conducir en estado de ebriedad y tras tres estancias en rehabilitación, tuvo que pasar algunas horas en prisión. Ese fue uno de los primeros episodios en los que la joven definitivamente perdió el rumbo, pues luego salió a la luz que no sólo estaba ebria, también había consumido drogas.
MÁS: 11 famosas que han sufrido anorexia y otros trastornos alimenticios
Su droga preferida es la marihuana
Así lo dijo en entrevista al programa de Piers Morgan Tonight, para CNN, que pese a que los medios insisten en que ella es adicta a la cocaína, ésta la consumió entre los 20 y los 23, porque le recordaba a su papá. Dijo que nunca había consumido LSD, heroína o todas esas sustancias que los medios especulaban. Dijo que consumía marihuana y éxtasis, por los efectos que tenían en ella.
Problemas económicos
Pese a ser una estrella que comenzó a trabajar siendo niña, Lindsay ha tenido problemas de dinero en más de una ocasión. Según reportó The New York Post en el 2014, Lindsay tenía un problemas al deslizar sus tarjetas de crédito, lo que acrecentó los rumores sobre lo sano de su economía.
MÁS: 11 famosas que han ganado la lucha contra el cáncer
Desnudos explosivos
La actriz tuvo que enfrentar rumores por parte de la prensa en los que aseguraban que además de ser adicta a sustancias prohibidas, Lindsay era adicta al sexo y que sus fiestas no sólo terminaban en excesos en el consumo de alcohol y drogas sino en días de sexo desenfrenado. Lindsay nunca lo confirmó o negó pero decidió callar los rumores posando desnuda para la revista New York al puro estilo de Marylin Monroe.
Cambios drásticos en su imagen
La cabellera pelirroja, las pecas y sonrisa encantadora, fueron el sello por mucho tiempo de Lindsay, pero los excesos no se quedaron sólo en el consumo de sustancias prohibidas, también sufrió cambios drásticos en su imagen. Se despidió de su color natural de cabello, comenzó a inyectarse los labios y a hacer cuanto pudo para rejuvencer, teniendo como resultado, una imagen avejentada.