Por Alessia Di Bari
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¿Alguna vez has sentido que se te acaba la imaginación y ya no sabes qué hacer y/o que pedirle a tu pareja en la cama? No te angusties, esto es muy común, no nos enseñan a estimular la creatividad sexual, de hecho nos las coartan.
Así que deja de preocuparte y mejor pongamos manos a la obra y empecemos a ocuparnos de ella.
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– Melomanía a tope… ¡Musicaliza tu encuentro! Sí, prueba diferentes tipos de música durante tus encuentros sexuales y sólo observa cómo te sientes y qué cambia. La música tiene un impacto sobre nosotros y nos mueve emocionalmente, descubre cuál es la que más te mueve y te ayuda a ponerte en sintonía.
– Conoce nuevos lugares. Sí, desde una sex shop hasta un bar swinger. Salir y conocer lugares distintos es perfecto para tomar ideas y ayudarle a tu imaginación a crear ambientes y situaciones diferentes que te podrán apoyar a darle un toque especial a tu vida sexual.
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– Incluye nueva información. A veces lo único que necesitamos es información para que nuestra creatividad empiece a fluir. Es crear la base para tener algo de donde partir. Esto es muy sencillo, puedes leer, ver películas, ir a obras de teatro, ver exposiciones de arte, etc.
– Experimenta. No importa si esen la cama o en la cocina, a veces es más fácil empezar por lugares que sean menos amenazantes para nosotras. Lo que necesitamos desarrollar es la actitud, así que no importa por dónde empieces.
– Juega. Cuando nos divertimos las cosas fluyen mejor. Nos ponemos curiosas, divertidas y la creatividad se empieza a dar de forma natural. Además es un estado que nos permite disfrutar el momento, detalle por detalle.
– 5 minutos al día. ¡No necesitas más! Pon tu alarma para que te avise cuando haya pasado el tiempo y no tengas que estar preocupada revisando el reloj. Tu único trabajo durante estos minutos es fantasear. Sí, deja que tu imaginación vuele, enfócate en pensar en sexo y en lo que te gustaría hacer y/o que te hicieran y deja que llegue hasta sus últimas consecuencias.
Como puedes ver es bastante sencillo, sólo es cosa de ponernos proactivas y empezar a hacer algo por nosotras y nuestra vida sexual.
