Así se ven ahora Taylor Momsen y otros niños actores de los clásicos navideños

Por Karen Hernández

La época navideña viene cargada de aires de nostalgia y películas que seguro te sabes de memoria

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Personajes cascarrabias, niños traviesos, super héroes de juguete y mucha nieve fueron la clave para hacer de estas películas un básico en el repertorio navideño, sin embargo, mientras que unos continuaron con éxito en la actuación, otros se quedaron en el olvido y otros se perdieron en el camino. .

Taylor Momsen

El Grinch

En el 2000, vimos cómo Taylor Momsen dio vida a la pequeña Cindy Lou, una «Quién», que aunque sacó de quicio al Grinch con su espíritu navideño, logró despertar su corazón perdido. Por supuesto, la chispa de Jim Carrey fue clave para hacer una película entrañable, pero la ternura e inocencia de Taylor, convirtieron este cuento clásico en un favorito de la familia. Aunque siguió en diversos proyectos de actuación y modelaje, en 2007, la carrera de Taylor despuntó con su personaje Jenny Humphrey, en la serie  Gossip Girl. Pero fue en 2009 cuando cambió los sets de filmación por micrófonos y guitarras eléctricas, cuando formó su propia banda de rock, Pretty Reckless.

Jake Lloyd

El Regalo Prometido

La película navideña favorita de 1996, donde Arnold Schwarzenegger, nos hace reír con su papel de padre en busca del regalo perfecto para su hijo, interpretado por Jake Lloyd. Quizá este niño actor te sonará mejor si mencionamos Episodio I de Star Wars, donde interpretó al pequeño Anakin Skywalker, mucho antes de sucumbir al Lado Oscuro. La carrera de Jake en la industria fue muy rápida, comenzó en el 94 y para 2001 ya estaba retirado. Según informó el actor, su decisión de dejar la actuación surgió a raíz del bullying que sufría por parte de sus compañeros de clase. Sin duda, este joven era una promesa actoral, sin embargo, como si se tratase de su personaje, en 2015 sucumbió al «lado oscuro» pues fue detenido y enviado a prisión luego de una persecución en auto con la policía. Además, fue internado en un hospital psiquiátrico en busca de ayuda profesional, pues se determinó que padece trastornos de la personalidad.

Macaulay Culkin

Mi Pobre Angelito

Mi Pobre Angelito es de esas películas navideñas atemporales que puedes ver en pleno julio y sientes la magia de la navidad recorrer tu piel. Fue a principios de los 90 que esta cinta hizo su gran aparición en pantalla, catapultando a la fama al pequeño Macaulay Culkin. Es imposible no quedar encantado con las travesuras de Kevin McCallister (Macaulay), tanto que desearíamos aplicar los mismos trucos «ahuyenta ladrones». El pequeño exploró diferentes géneros, desde comedia hasta drama y suspenso y aunque tuvo muchs otros éxitos, en 2004 comenzó a tener altibajos  entre drogas, alcohol, arrestos y un aspecto andrajoso. Sin embargo, después de presentarse en diversos juicios y rehabilitaciones, Macaulay se ha declarado retirado de la industria y busca pasar lo más desapercibido posible.

Josh Hutcherson

El Expreso Polar

Aunque se trata de una película animada, el actor quedó perfectamente plasmado en el personaje de un niño que, al perder el espíritu navideño, viaja hasta la Villa de Santa Claus para recuperarlo. Josh consolidó su carrera en años posteriores e incluso llegó a compartir el set con Robbin Williams, Will Ferrell y más recientemente con Jennifer Lawrence en Los Juegos del Hambre. Además, al actor ha participado en diversas campañas en pro de la comunidad LGBTI.

 Mara Wilson

Milagro en la Calle 34

El entrañable remake de la cinta de 1947, contó con la presencia de Mara Wilson para interpretar a una adorable niñita que no creía en Santa Claus y termina teniendo una simpática amistad con un anciano al que su madre pidió hacer de Santa, en una tienda departamental.  Mara vivió la fama desde temprana edad con cintas que se convirtieron en la favorita de todos como Mrs. Doubtfire y Matilda. La pequeña, compartió set con grandes actores como Robbin Williams y Dani Devito, incluso llegó a ganar reconocimientos por su talento. Aunque tenía una carrera prometedora, en el 2000 tuvo su último papel en una película y confesó que actuar era algo muy aburrido. La actriz pronto comenzó a tener problemas de ansiedad, depresión y un desorden obsesivo compulsivo que la llevó a alejarse del medio por completo. Ahora, mediante la organización UROK, se dedica a ayudar a jóvenes con trastornos mentales.

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