Puede que si te decimos que llevar leggings con bailarinas es tendencia, tu primera reacción sea de total incredulidad. ¿Cómo algo tan básico (y en ocasiones polémico) puede convertirse en un look sofisticado y digno de street style? Lo entendemos: esta combinación divide opiniones. Sin embargo, tras ver cómo las expertas en moda están reinterpretando ambos clásicos, estamos listas para rendirnos ante esta dupla inesperada que promete comodidad, elegancia y un aire “effortless” irresistible.
Las bailarinas (también conocidas como manoletinas) son ese calzado que nunca pasa de moda. Del ballet a las calles parisinas y, de ahí, a los looks más chic del 2025, su encanto atemporal sigue vigente.
Son femeninas, versátiles y capaces de transformar un atuendo sencillo en uno lleno de estilo. Por su parte, los leggings han recorrido un largo camino: de ser una prenda deportiva o de descanso, han evolucionado hasta convertirse en una pieza clave del armario cápsula contemporáneo. Y ahora, juntos, forman un tándem que grita comodidad con un toque de refinamiento.
Los leggings con bailarinas serán tendencia este año
Este año, la clave está en la silueta y en los detalles. Los leggings se reinventan en versiones más estructuradas, de algodón grueso, sin transparencias y con efecto moldeador. Adiós a los tejidos brillantes o demasiado elásticos: los nuevos modelos buscan un acabado pulido que realce la figura sin sacrificar la comodidad. El color negro sigue siendo el favorito, aunque también se imponen los tonos topo, gris oscuro y chocolate.
Las bailarinas, en tanto, se presentan con acabados de piel suave, punta cuadrada o redondeada, y colores neutros. Las opciones en negro o beige son las preferidas de las fashion insiders, aunque los tonos vino o nude también suman puntos de estilo. Para un toque extra, apuesta por aquellas con un lazo fino o detalles metálicos que aporten un aire romántico.
¿Cómo llevar leggings con bailarinas (y triunfar en el intento)?
El truco está en equilibrar la silueta. Si los leggings abrazan tu figura, opta por prendas superiores más sueltas o estructuradas: camisas masculinas blancas, blazers oversize, jerséis de lana o cashmere, o incluso un abrigo largo tipo batín para un efecto más sofisticado. El objetivo es crear un contraste entre lo ajustado y lo relajado, sin perder la armonía.
Los accesorios también juegan un papel fundamental. Un bolso de mano o una bandolera minimalista puede elevar el conjunto al instante. Añade unos lentes de sol grandes, un moño bajo o una coleta pulida, y estarás lista para cualquier ocasión: desde un café con amigas hasta una jornada de trabajo informal.
En definitiva, los leggings con bailarinas son el nuevo uniforme del chic sin esfuerzo: una fórmula ganadora que combina lo mejor de ambos mundos (comodidad y estilo). Si alguna vez juraste no volver a usar leggings fuera del gimnasio, este es el momento de reconsiderarlo. Las nuevas versiones demuestran que la elegancia también puede sentirse tan cómoda como dar un paso de ballet.
