La manzanilla o camomila es un remedio muy recomendado por las abuelas como infusión para desinflamar el estómago o combatir el insomnio y relajarte.
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Pero realmente tiene tantas propiedades que puedes incluirlo en tus rutinas de belleza y aquí te diremos cómo aprovechar estas florecitas maravillosas para tu piel, cabello y uñas.
PARA LA PIEL
En los ojos
Cuando tus ojos amanecen muy inflamados porque dormiste mal, o lloraste, aplicar unas bolsitas de té frío en los ojos no solo te dará una sensación de alivio única, sino que además te bajará la deseinflamación.
Aclara la piel
Si tienes ojeras oscuras o manchas en la piel, la infusión de manzanilla tibia te ayudará a atenuar las zonas oscurecidas, gracias a sus agentes aclarantes.
Para calmar pieles sensibles
¿Tienes rosácea, psiorasis o alergia? El agua de estas maravillosas florecitas calma el enrojecimiento y las reacciones cutáneas.
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Limpiador natural perfecto
Tiene beneficios antisépticos por lo que si tienes una piel propensa a tener acné o granitos, la manzanilla es el remedio natural ideal para tratar esos brotes pues limpia a profundidad.
PARA EL CABELLO
Para un aclarado natural
Si quieres darle un efecto de highlights naturales en tu melena, la manzanilla es el aliado. Funciona agregando una dosis de agua de manzanilla al champú o como tónico que aplicas directo al cabello por media hora y retiras.
Quita la irritación en el cuero cabelludo
Si tienes comezón y zonas irritadas en la cabeza, un enjuague de manzanilla puede ser la solución a este problema capilar.
PARA LAS UÑAS
Fortalece y quita apariencia amarillenta
Si tienes uñas débiles o quebradizas, mezcla té de manzanilla con media cucharadita de aceite de oliva y unas hojas de menta; deja repozar por media hora y aplica como si fuera esmalte. Esto dará fuerza y desmanchará tus uñas.
