Frascos que levitan

Las mejores cocinas no son las más grandes. Son las que ocupan mejor los espacios. Por eso este proyecto ayuda a redefinir el uso de las alacenas y ampliar los mesones, que siempre se achican con el hervidor, la tostadora, los condimentos, el café, etc.

La clave es poner todo en frascos de vidrio en el aire. Flotando. Así no se ocupa ninguno de los dos espacios mencionados  –alacenas y mesones- y, de paso, se decora la cocina con distintos colores y un toque hogareño.

Lo primero es definir  y marcar con un lápiz el lugar donde se colgarán los frascos. Es importante considerar la distancia a dejar entre cada uno, considerando que debe quedar espacio suficiente para poder tomar y girar el frasco. Nosotras dejamos cinco centímetros entre tapa y tapa.

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Con la ayuda de un taladro, hagan dos perforaciones en la tapa de cada frasco.  Luego atornillen las tapas a la superficie previamente marcada, pasando un tornillo por cada perforación hecha. Deben quedar bien apretados.

Es muy importante usar dos o más tornillos para fijar bien cada tapa, ya que si se usa uno solo, la tapa girará sobre si misma usando el tornillo como eje.

¡Es la mejor solución para decorar y aprovechar los espacios!