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Pucha que son lindos. Las mezclas de colores, tener todo a la vista, en un estuche decorado. Nos encantan los sets de maquillaje, y hay algo en ellos que me hace quererlos todos. Tenía tantas ganas, que me compré uno. Total – pensé- con eso estoy y no necesito nada más. Craso error.
Prometen traer todo lo necesario, pero sabemos que no es así. Si a uno le falta corrector de ojeras, al otro le falta máscara de pestañas; qué hablar de la base de maquillaje o un hidratante para labios. Imposible pensar en un encrespador. El rubor que viene es justo de un color que no favorece a nuestra piel, las sombras azules no le pegan a mis ojos café y qué decir de los labiales café para señoras. Porque con esto de los sets, no se pueden elegir los colores.
Así que mi “set” lo aprovecho como en un 50%: el rubor es fucsia (soy súper pálida así que NO), la máscara de pestañas no dura nada, la mitad de los labiales son de vieja y justo se cayó y se rompieron 2 sombras. Obviamente, las que más me gustaban. Entonces decidí que no compraría más sets de maquillaje, que sólo compraría cosas sueltas y las pondría en un cosmetiquero, como debe ser. El otro día, casi caigo. Era un set de maquillaje que incluía un rubor de color adecuado, su respectiva brocha; labiales en tonos suaves y sombras medias rosadas. Una tentación irresistible “Justo me sirve para la oficina, sólo tengo que agregar una máscara y un corrector de ojeras” . Un pequeño revés económico me hizo recapacitar; sí, iba a usar el rubor; pero labiales y brillos tengo varios (típico regalo de cumpleaños), las sombras rosadas servirían sólo para algunos días y si el estuchito se caía, todo podía perderse.
Pero… pucha que son lindos!!
¿Qué opinan de los sets de maquillaje?¿Sirven o no sirven?
