Es seguramente la estación del año en que más seguido nos lavamos el pelo, podemos llegar incluso a las dos veces diarias. No tenemos otra opción porque entre el smog de la ciudad y la transpiración de nuestro cuero cabelludo, nos queda un cabello pegado a la cabeza y grasiento. El problema es que mientras más lavados, más graso se pone el pelo, ¿qué hacemos entonces? Lee estos consejos que te pueden servir.
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En verano lo más importante es cuidar las cutículas (durante todo el año en realidad), porque si tenemos un cuero cabelludo sano, entonces nuestro pelo crecerá fuerte también. Por eso es que dicen que hay que solucionar los problemas desde la raíz. Para ello lo primero que necesitan es un shampoo con protector solar, además aplicar acondicionadores y máscaras hidratantes, por la cantidad de lavado.
Si se lavan el pelo todos los días, como la mayoría de las veraneantes, lo más recomendable es utilizar un shampoo suave y mantener a raya las puntas: córtalas seguido, sobre todo si están amarillentas o si se abren con doble punta.
Si estás en la playas debes sí o sí utilizar un gorro, para proteger la raíz de los rayos del sol y además tienen que utilizar un spray protector, sobre todo aquellas de pelo teñido, para que no les cambie el color. Después de entrar al mar, se tienen que enjuagar el pelo con agua fría y muy bien para sacar todos los restos de arena y sal, elementos que resecan nuestro pelo.
Pero no todo está en los productos que apliquemos, también se tienen que preocupar de la alimentación para tener un cabello fuerte y brillante. Lo mejor es comer frutas y hortalizas y además beber mucha agua.
