De seguro tu mamá o abuelita más de una vez te dijeron que solo hasta que el bebé erupte puedes dejarle de darle palmaditas en la espalda.
Sobre el tema, la doctora Susej Fernández, experta en crianza y alimentación infantil explica que esas son teorías de las abuelas y que la realidad es otra.
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«No tienes que pasar horas castigada sacando gases. No tienes que estar ahí sentada, castigada dándole palmaditas al bebé hasta que escuches que salió un gas».
Asegura la experta que no se necesita obtener gases del bebé siempre. «Si el niño se ve feliz o si se queda dormido durante una toma o inmediatamente después de ella, pues déjalo descansar. La mayoría de los bebés amamantados no necesitan eruptar con tanta frecuencia como los bebés alimentados con tetero porque tienden a tragar menos aire mientras comen».
Apunta la doctora que cada bebé es un mundo y por eso es importante observarlo. «Si ves que se tuerce, suelta el pecho y llora ponlo en posición vertical para ayudarlo a eruptar, sin olvidar que no todos tienen que hacerlo».
Ahora bien, detalla la experta que las mamás lo que nunca deben olvidar es que sacar los gases es un momento familiar importante ya que es la excusa perfecta para cargar y apapachar al bebé, entonces es válido que papá o la abuela intenten sacarle los gases para alegría de todos.
Pero lo importante es que este no sea un acto que te mortifique y mucho menos que te mantenga largas horas ocupada pudiendo hacer otras actividades con tu bebé y en general con la familia.