Al ser primeriza, quieres consentir a tu hijo en todo lo que le provoque, quiera y pida. Pero seguramente te ha pasado que cuando le dices que no o no le proporcionas lo que te está pidiendo, grita y se pone a llorar.
PUBLICIDAD
Este es un cuadro muy común no solo en el ámbito familiar sino el escolar. Muchas veces las maestras merecen un premio por tener la paciencia y valentía para sobrellevar niños que gritan mucho cuando quieren algo porque piensan que así será más fácil conseguirlo: no.
La razón de estos gritos pueden ser de dos naturalezas: porque no saben expresar de otra forma lo que siente o por imitación del adulto, detalló la web especializada Guía Infantil.

Tienes que saber que esto no es definitivo: tú como padre puedes cambiar la conducta de tu pequeño.
Cómo calmar a tu hijo cuando llora
- Tu hijo grita, pero no le grites a él. El grito solo lo va a atemorizar, no lo educará para nada. Es más, si le gritas a tu hijo, ese es el ejemplo que le estás dando y muy probablemente, él sea un adulto gritón.
- Hablar calmados, esa es la vía para calmar a tu hijo cuando está exaltado. Si tu hijo grita pero tú hablas normal, él se verá forzado a bajar su tono de voz para poder escucharte.
- Enséñalo a que nunca lo escucharás si te está gritando, que solo lo escucharás cuando te hable pausada y civilizadamente. Así aprenderá a que no conseguirá lo que quiere con pataletas malcriadas.