La maternidad sigue siendo una aspiración incluso para la nueva generación de mujeres productivas, organizadas e independientes. Las milenials han bajado la edad para acudir a la congelación de óvulos hasta una década.
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Ser madre y no salirse del esquema hiperorganizado de una mujer moderna ha llevado a la industria de la reproducción asistida a buscar nuevas formas para atraer a este mercado.
Susan Herzberg, presidenta de Prelude Fertility en los Estados Unidos, asegura que la preservación de la fertilidad solía atraer a mujeres en sus treintas, pero ahora es otra la realidad.
Cada vez más mujeres jóvenes se embarcan en la planificación de su maternidad y es en gran parte gracias a la mercadotecnia y promoción de las técnicas.
La compañía de Herzberg, garantiza que el proceso ahora es más eficiente, rápido y barato, ofreciendo una atractiva alternativa para mujeres en sus veintes.
Campañas diseñadas para chicas, hechas en tono amistoso que aseguran que la mejor alternativa es «Congelar tu futuro» aparecen a diario en los medios de comunicación.
Otras más agresivas incluyen las llamadas `Fiestas congeladas´, unas reuniones informativas donde se reparte champaña y hasta autobuses donde se realizan pruebas hormonales.
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La congelación de óvulos ha presentado un gran crecimiento en el sector de mujeres de entre 20 y 30 años, incluso sus costos han bajando haciéndose más accesible.
Pero no termina allí, muchos padres con hijas adolescentes consideran este procedimiento como un regalo y muchos están dispuestos a ayudarlas a pagar.
La expectativa sobre el futuro y esperar lo suficiente para sentirse realizada personalmente para luego ser madre son las principales razones para el auge de esta técnica.
