Quito despierta estos días bajo un sol vibrante, radiante y algo travieso, recordándonos por qué se dice que estamos en el centro del mundo. Con la temporada de verano bien instalada en la capital, nivel UV que alcanza valores entre 8 y 11, considerados muy altos a extremos, y temperaturas que pueden rozar los 26 °C, quienes tienen peludos en casa están enfrentando un nuevo reto: cómo proteger a sus mascotas del sol intenso y del calor extremo que ya se siente en cada paseo. Las autoridades, como el INAMHI y el COE Metropolitano, advierten: el sol en Quito no perdona.
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La razón principal de esta radiación implacable radica en la geografía única: estamos a 2.850 metros de altitud y muy cerca de la línea ecuatorial, lo que significa que la capa atmosférica que nos protege es más delgada y el sol golpea de forma más directa. Por eso, Quito es considerada una de las ciudades con mayores niveles UV en el planeta, especialmente en junio, julio, agosto y septiembre.
En este marco, es clave cuidar especialmente a nuestros perros y gatos, cuyos cuerpos también sienten los efectos del sol más de lo que pensamos. Según expertos veterianarios, la exposición prolongada puede provocar deshidratación, quemaduras, golpe de calor e incluso consecuencias graves como coma o muerte.
Pero ¡no todo es preocupación! También hay un espacio de acción diaria para hacer de esta temporada una experiencia saludable, divertida y segura para tus mascotas. Aquí van los mejores consejos:
1. Elige bien la hora del paseo
Evita las horas pico de radiación solar, entre las 10:00 y las 15:00. Los expertos recomiendan salir a pasear muy temprano, al amanecer, o en la tarde después de las 17:00, cuando el sol ya no azota tan fuerte. Paseos cortos y con sombra son clave.
2. Sombra, sombra, ¡más sombra!
Planea rutas con sombra abundante para que tu mascota pueda descansar sin exponerse. Si están en casa, asegúrate de que tengan un rinconcito fresco protegido del sol directo, y siempre acceso libre a agua fresca. Los recipientes con agua deben estar limpios y disponibles en varios puntos.
3. Revisa el suelo
El asfalto y las superficies duras se calientan muchísimo. Toca con la palma de tu mano: si no la soportas más de 5 segundos, tampoco lo permita tu perro caminar en esas áreas. Césped, pisos frescos o sombra bajo un árbol son opciones mucho mejores.
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4. Cepillado y cuidado de piel
El cepillado frecuente ayuda a eliminar motas o triggeres que impiden la circulación de aire alrededor del pelaje, facilitando que el peludo respire mejor. Para mascotas de piel clara o sin pelaje, usar protector solar especial en la nariz y orejas, y bálsamos hidratantes naturales en almohadillas y nariz tras el paseo es muy recomendable.
5. Ropa y bloqueador UV
En el mercado ya hay ropa outdoor con filtros UV diseñada para perros de piel clara o sin pelo. Úsala con precaución: cubrirlos puede elevar su temperatura corporal, así que observa siempre si sienten calor. El bloqueador con SPF 30+ y resistente al agua debe aplicarse cada dos horas en zonas expuestas.
6. Señales de golpe de calor: actúa rápido
Debes actuar de inmediato si observas jadeos intensos, boca seca, letargo, vómitos, encías rojas o azuladas, convulsiones o dificultad para levantarse. Estos signos alertan de un golpe de calor. Llevar al veterinario de urgencia puede salvar la vida de tu mascota.
7. Refresca de forma divertida
La idea es convertir el cuidado en un momento de juego y cercanía: mojar suavemente su abdomen, patas y orejas con agua fresca, ofrecer helados caseros de fruta natural aptos para mascotas, y usar ventiladores cerca de sus zonas de descanso.
Quito en este fin de semana del 1 al 3 de agosto mostrará un clima fresco por las noches, amaneceres agradables y algunas lloviznas por la tarde. Las temperaturas máximas rondarán entre 21 °C y 22 °C, con mínimas entre 7 °C y 9 °C. Sin embargo, esa humedad ligera no reduce la radiación UV: el sol sigue siendo poderoso al mediodía.
Así que, con precaución, cariño y previsión, puedes hacer de estos días un verano alegre y divertido también para tu mascota. Protéjela, respétala y dale lo mejor de ti en cada paseo.