Las berenjenas son una de las hortalizas consumidas por las personas que están a dieta y quieren perder algo de peso. Pero, este producto tiene un sabor bastante amargo y que a muchas personas no les agrada.
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A pesar de esto, las berenjenas son un alimento con propiedades muy beneficiosas sobre la digestión de los ácidos grasos, la presión arterial y la salud de los riñones.
Y es que el sabor amargo de esta hortaliza se encuentra en su pulpa, motivo por el que no importa si está cruda o ha sido cocinada, siempre está ahí presente.
Sigue los trucos
¿Cómo puedo quitar el amargor de las berenjenas?, es fácil y sencillo. Sigue estos sencillos trucos para quitarle ese sabor amargo y desagradable.
La berenjena, además de proteger el hígado y aportar antioxidantes, también es rica en fibras que ayudan a eliminar el colesterol de otros alimentos.
El sabor amargo de las berenjenas se deben a que su pulpa posee antioxidantes, pero al entrar en contacto con el aire éstos se oxidan y son los ‘culpables’ de ese sabor que puede llegar a resultar picante y ácido en el paladar.
Recuerda que las maneras más saludables y digestivas de consumir las berenjenas son asadas entera al horno, a la plancha y luego aliñada ligeramente o trabajada en patés vegetales.
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Así le puedes quitar el sabor amargo a las berenjenas:
La sal fina
Este es uno de los trucos de cocina más utilizados. Al añadir sal fina a las berenjenas cortadas en láminas se formado una capa. La sal absorbe parte de los jugos de la hortaliza y ses sabor amargo.
Limón y sal gruesa
Corta las berenjenas en rodajas. Coloca las rodajas en un colador, sin encimarlas. Rocía las berenjenas con el jugo del limón y la sal.
Remojo con agua, sal y leche
Otra fórmula tradicional e igualmente efectiva es dejarlas en remojo con agua, leche y sal. Se cortan al gusto, en láminas o en trozos alargados, se colocan en un cuenco y se cubren con agua y leche, añadiendo una abundante cantidad de sal, preferiblemente gorda.
Se tapa el cuenco y se deja en remojo media hora, tras lo cual hay que escurrirlas y aclararlas con agua fría.
Sólo faltará aclararlas con agua fría para eliminar el exceso de sal.
Con harina
Se coloca agua y abundante sal gorda en el cuenco con las hortalizas y se añade la harina al final. Pasada la media hora de remojo, se escurren y se aclaran con agua fría. Listo, así las puedes preparar en cualquier plato de tu preferncia.