Llegó la hora de celebrar tu cumpleaños y estás convencida de que tienes todos los atributos de una buena Libra. Sin embargo, la astrología divide a cada signo del zodiaco por decanatos, lo que le otorga características distintivas a cada uno. Es el día de tu nacimiento el que determina a cuál perteneces.
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Cada decanato tiene diez días, el primer decanato de Libra comienza el 23 septiembre y termina el 2 de octubre; el segundo el 3 de octubre y culmina el 13 del mismo mes y el tercer decanato inicia el 14 de octubre y cierra el 22 de octubre.
Creativa e impulsiva
Las personas nacidas en el primer decanato de Libra tienen la maravillosa influencia de Venus, el planeta de la belleza y el amor. Tienden al placer y los lujos, tanto que podrían ser calificados como extravagantes y derrochadores. Son carismáticos y su magnetismo es innegable.
Su esencia es creativa, están ganados a nuevos proyectos y suelen aportar ideas con mucha facilidad. Sin embargo, también pueden ser impulsivos y tener poca autoestima. Necesitan de terceros para sentirse amados y respetados.
Intelectual y sociable
Como buena Libra, las nacidas en el segundo decanato tienen habilidades para relacionarse con los demás con mucha facilidad. Aunque es una mujer sumamente independiente, valora la compañía y el afecto de sus seres más queridos.
Este decanato está regido por Urano, el planeta del intelecto, que la hace una personas de mente aguda y ágil. Su determinación es otra de sus virtudes, todo lo que se propone lo logra; por lo que quizás a veces es muy severa consigo misma y su entorno.
Curiosa y equilibrada
Su vitalidad y carisma marcan su personalidad regido por Mercurio. Las nativas del tercer decanato de Libra tienen una personalidad avasallante y están llenas de energía. Mercurio le otorga además rapidez de pensamiento y eso las ayuda a ser exitosas en sus trabajos.
Son curiosas y sobre todo abiertas a nuevos caminos; no le temen a los retos. Pero eso sí, todo pasa primero por su cerebro y después por el corazón. Difícilmente se dejan llevar por sus emociones, incluso les cuesta demostrar sus sentimientos. Son sumamente equilibradas y sus juicios siempre son razonables.
