Aries: del 21 de marzo al 19 de abril.
Nunca admiten cómo se sienten. Guardarán sus emociones en lo profundo de su pecho hasta que exploten de rabia porque la ira es más fácil de sentir que la tristeza o incluso la alegría.
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Tauro: 20 de abril – 20 de mayo
Ellos insisten en cosas que hiciste mal hace años. Nunca dejan ir tus errores. Seguirás teniendo la misma pelea con ellos una y otra vez. La terquedad cansa a cualquiera.
Géminis: 21 de mayo – 20 de junio
Cambian entre tratarte como si fueras su mundo entero y tratarte como basura. Es un extremo o el otro. Nunca sabes lo que vas a conseguir con ellos. A nadie le gusta esa inestabilidad.
Cáncer: del 21 de junio al 22 de julio.
Son demasiado sensibles. Lloran cuando los confrontas por algo que hicieron mal. Incluso cuando mantienes la calma y haces todo lo posible para evitar que se molesten, vienen las lágrimas.
Leo: del 23 de julio al 22 de agosto.
Quieren cosas a su manera. Se niegan a comprometerse.
Virgo: del 23 de agosto al 22 de septiembre.
Son demasiado tercos Nunca admiten sus errores. Ellos piensan que siempre tienen razón. Cuando hacen algo mal, culparán a todos excepto a ellos mismos.
Libra: 23 de septiembre – 22 de octubre
Intentan encontrar una razón más profunda para todo. Suponen que hay significados secretos a lo que has dicho en lugar de tomar tus palabras a su valor nominal.
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Escorpio: 23 de octubre – 21 de noviembre
Les gusta beber. Les gusta la fiesta. Se aburren de quedarse en casa y buscan perderse cada fin de semana.
Sagitario: del 22 de noviembre al 21 de diciembre.
No tienen opinión. Actúan en base a lo que otros digan o hagan en lugar de tener su propia persona individual.
Capricornio: 22 de diciembre – 19 de enero.
Ellos no quieren estar en una relación. Ellos cierran su corazón. Alejan a la gente.
Acuario: 20 de enero – 18 de febrero
Ellos son perezosos. No quieren planificar fechas. Ellos no quieren hacer un esfuerzo. Dejan que la presión caiga sobre otros.
Piscis: 19 de febrero – 20 de marzo
Son el tipo de persona que cuidan a los demás como si fueran bebés. Creen que están ayudando y haciendo un bien, pero terminan tratándote más como un bebé que como un adulto. Nadie quiere otra mamá que les ordene.
