El hecho que ocurrió en Estados Unidos y fue compartido por el medio digital Unilad, dejo a más de uno sorprendido.
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Deneka mientras estaba con su madre y su prima, decidió pagar su factura de cable en su teléfono y vió que era $648. Luego revisó la declaración y se dio cuenta que había $290 en películas clasificadas como XXX que su hijo de 11 años había comprado en días al azar en marzo mientras ella estaba en el trabajo.
Estaba tan molesta que no podía esperar para darle un grito por eso, así que después de la escuela, ese día esperó a que llegara a la casa y le realizó el reclamó en presencia de sus familiares.
Mientras que la conversación continuaba una integrante la familia compartió por Twitter parte de regaño:
«Lo más divertido de todo fue el hecho de que realmente compró porno y no sabía que podía encontrarlo gratis en internet».
No esperaba que se hiciera viral, pero sin duda era demasiado chistoso. Más tarde, la misma cuenta publicó el video en el que revisa el contenido y le pregunta al niño, quien al principio miente al respecto antes de dar la razón por la que ‘solo quería ver películas’.
Boo se vio obligado a limpiar toda la casa, incluyendo fregar los pisos y aparentemente se molestó y se encerró en su habitación después, lo que significa que está castigado en el futuro previsible.
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Alguien que sintió lástima por Boo creo el #teamBoo #justifyforBoo, burlándose del hecho de que en la web se encuentran muchísimas libres de costo para consumir contenido de adultos.
i’m just thinking of all the free porn that could’ve prevented this travesty from occurring. this is a sad day in black america #justiceforboo https://t.co/Q2jvbZTgJZ
— papi (@ELDOLLAZ) April 5, 2018
neka i feel like it was your duty to tell him bout porn hub & the other free flicks 😂 #teamBoo #justiceforBoo
— Slee the Slayer. (@sleezyfbabyy) April 4, 2018