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Foco Migrante: integración y solidaridad a través del reciclaje

Este fondo comunitario recicla bicicletas, las repara y se las entrega a parte de la población migrante que hay en Santiago. Una mirada al trabajo solidario y comprometido que realizan.

Daniel Lanfranco aún recuerda esa primera bicicleta que regalaron. También recuerda la reacción de Miguel, un hombre que había llegado de República Dominicana a Santiago y trabajaba en La Vega, debiendo salir desde su casa todos los días a las tres de la mañana. Ahora, con la bicicleta que recibió de obsequio apenas tarda diez minutos en llegar a su lugar de trabajo.

“Todavía me acuerdo de la cara de felicidad de él”, cuenta Daniel, quien es el fundador de Foco Migrante, fondo comunitario que recicla bicicletas en desuso, las repara y luego se las entrega a la población migrante que existe en la capital de Chile. En poco más de un año de vida han tenido una buena acogida en el público y ya han regalado 58 bicicletas.

Los destinatarios han sido personas que debieron dejar atrás su país de origen y trasladarse hasta Chile para probar mejor suerte. Hay colombianos, ecuatorianos, holandeses, haitianos, bolivianos, peruanos, venezolanos y también chilenos; todos se han visto beneficiados con el noble trabajo que realiza esta agrupación.

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Para conseguir una bici hay que postular y llenar un formulario explicando para qué va a necesitar el medio de transporte, si es para trabajar o para movilizarse hasta el trabajo se consiguen más puntos y así, más posibilidades de optar a una bicicleta. Lo mismo si la persona es mujer o tiene hijos.

“El proyecto fomenta la interculturalidad y lucha contra el racismo y la xenofobia…La respuesta ha sido bastante positiva, de mucho apoyo, de lo contrario no hubiese podido subsistir”, agrega Daniel.

El trabajo de Foco Migrante se realiza en conjunto con la comunidad. Ellos reciben bicicletas que son donadas, o bien sólo algunas partes de ellas. Todo sirve cuando el objetivo principal es ayudar a quienes recién están llegando al país y se encuentran en una situación vulnerable. “No importa cómo esté la bici, recibimos de todo, algunas hechas pebre. La gracia es que todo es reciclable. A veces pueden donar sólo partes, sirve hasta la última tuerca”, explica este joven antropólogo.

Las personas que estén interesadas en colaborar con este fondo comunitario pueden entregar sus donaciones en el taller ubicado en el Liceo Miguel de Cervantes, en el Barrio Yungay, Agustinas 2492. O bien pueden contactarse con Foco Migrante a través de Facebook, o Instagram. Quienes deseen una bicicleta y quieran postular puedan contactarse utilizando las mismas redes sociales.

Foco Migrante también realiza talleres de mécanica y educación vial. Su trabajo comprometido e incansable ha sido destacado y recientemente resultó ganador de YouthActionNet Chile. Todo esto los motiva a seguir ayudando a través del reciclaje y la reutilización de bicicletas para que puedan contar más historias como las de Magaly, una venezolana que llegó a Chile con tres hijos y debía recorrer la mitad de Santiago a pie buscando trabajo, pues no tenía dinero para pagar el transporte público. Hoy cuenta con empleo y una nueva bicicleta gracias a este fondo comunitario.

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