Una alternativa diferente para sorprender a tus amigos. ¿Qué te parece una pizza patchwork? ¿Qué es eso? Una pizza hecha con diferentes ingredientes, la que va tomando colores diversos y buenos sabores, además de una particular forma de ordenar los alimentos. Tal cual sería una técnica patchwork aplicado a telas, botones, lanas y otros elementos que en armonía se unen y crean una hermosa obra. Bueno, en este caso, la obra es igual de linda y se suma un exquisito sabor.
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Si la razón para no hacer pizzas es el gusto de tus comensales, acá tiene la solución, ya que esta pizza contempla diferentes cuadritos con queso, con espárragos, tomate, berenjena, entre otros. Una opción exquisita para hacer en cualquier momentos y disfrutar con los tuyos.
Para hacer la masa de pizza sigue estos sencillos pasos y tendrás pronto un exquisito resultado para hacer este particular relleno.
Ingredientes
- Una bolsa de queso mozarella, de la mejor calidad que encontremos: la ocasión lo merece. Ya que nos ponemos a hacerla, creo que una buena mozarella es fundamental. Utlizar al gusto —a mi me sobró un poco—.
- Tomate frito casero al gusto
- Un bote de espárragos verdes
- Un bote de espárragos blancos
- Un tomate maduro hermoso
- ½ berenjena
- ½ zanahoria
- Orégano al gusto
- Unas escamas de sal de mar al romero
Cómo preparar la pizza patchwork
- Precalentar el horno a 220˚C
- Estirar con un rodillo la masa hasta conseguir un rectángulo. Cortar la masa sobrante con una espátula de madera y una regla. Es muy importante –fundamental— que quede muy finita.
- Poner una base de tomate casero y meter en el horno 12 minutos.
- Cortar y tener los ingredientes preparados y cortados en tiritas finas y de igual tamaño que nuestros retales vegetales. Esta labor es un pelín entretenida, pero no me digan que no queda ideal. Calcular el tiempo para tenerlo todo listo para cuando esté la pizza lista para sacar. El secreto de esta pizza está en escurrir y secar perfectamente los espárragos. Si no, ¡nos la pueden arruinar!
- Sacar la pizza.
- Para este paso es imprescindible trabajar con rapidez, para que la masa no pierda mucho calor. Colocar una capa de mozarella, y a continuación, las verduras como gustes, formando cuadrados alineándolas en direcciones contrapuestas, y combinando colores. Admite todo. Lo que se quiera.
- Añadir finalmente un poco de orégano. En mi caso, lo tengo natural en casa y es una delicia el aroma que desprende cuando lo espolvoreo por encima, y aproveché para estrenar unas escamas de sal marina de romero y que espolvoreé por encima de todo. Tienen la textura del cristal y un toque crujiente maravilloso.
- Volver a meter al horno unos 15 minutos. El tiempo es orientativo, pues depende del horno de cada uno: hasta que veas que la masa está dorada y los ingredientes en su punto.
- Servir inmediatamente.
Fuente: Webos Fritos
