En algún momento, a todos nos ha pasado. Haces tus compras semanales, tienes tus alimentos en casa y, por el trabajo, los compromisos, la falta de tiempo, decides comer fuera. Pasan los días y, cuando menos te lo esperas, tus alimentos se echaron a perder.
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Hemos hablado sobre el desperdicio de los alimentos, de cómo la industria de los alimentos eligen lo que llega al mercado o al supermercado; de cuando una zanahoria o una manzana no cumple con los estándares de estética requeridos para ser elegida por el consumidor. De acuerdo a un estudio, 15% de las zanahorias se tiran a la basura por cuestiones físicas, antes de llegar al consumidor. ¡Increíble!
¿Cuál es la huella de cada vegetal que se desperdicia? El cortometraje El Desperdicio (Waste), producido por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), muestra el costo ambiental del desperdicio de alimentos; lo que representa en agua, tierra, energía, inversión y el trabajo de las personas que se dedican a recolectar, manipular y entregar el producto.
Por ejemplo, una manzana requiere agua equivalente a 7 descargas del sanitario; esto sin contar el tiempo invertido en su producción, el uso de la tierra — que, muy probable, se desgaste con el paso del tiempo —, el trabajo de aquellas personas que recolectan, el transporte dependiendo su origen, nacional o internacional.
Y tú, ¿cuántos recursos desperdicias? Este es un llamado al consumo consciente y responsable. Antes de comprar, planea tus comidas. Todos los días revisa tu refrigerador. Si notas que algún alimento va de salida, utilízalo. Si no llegas a tiempo, es mejor que termine en una composta a que se deseche en la basura. ¿No tienes composta en casa? Busca un lugar que tenga composta comunitaria.
Tomemos el compromiso de reducir nuestra huella ambiental a partir de los alimentos, dando un uso racional y consciente, a manera de agradecimiento a la tierra, a las personas que trabajan día y noche para que tengamos comida en la mesa, pensando en los beneficios que nuestras prácticas traen al planeta.
