En la inauguración del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social, la presidenta Michelle Bachelet se refirió al problema del reconocimiento y respeto de la cosmovisión de los pueblos originarios en los proyectos de crecimiento que afectan sus tierras.
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“Sé que tenemos tareas pendientes en el reconocimiento de la diversidad cultural que existe en Chile. Lo dije en la campaña y lo repito aquí: para Chile es imprescindible tener un nuevo trato con los pueblos indígenas”, afirmó la mandataria.
El Convenio 169 de la OIT dice en uno de sus puntos que debe hacerse una consulta indígena, la cual actualmente se realiza, pero al momento de tomar decisiones, se pasa totalmente por alto, debido a que los intereses económicos de Chile topan directamente en su gran mayoría con los territorios indígenas.
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Esto se debe a que, en su primer gobierno, la presidenta Bachelet condicionó la fórmula para hacer la consulta, lo que, aparentemente, va a cambiar ahora. Borrar lo escrito con el codo, como lo ha hecho con varios decretos que hizo en su primer gobierno y que ahora cambia o niega totalmente.
Esperemos que ahora sea verdad que nuestros pueblos indígenas puedan desarrollarse plenamente sin la presión de adaptarse a nuestra cultura y olvidar su propia visión del mundo, y que nosotros aprendamos más de ellos, porque realmente tienen mucho que enseñarnos.