El volcán Tungurahua (“Garganta de fuego”, en lengua quechua) es una de las principales atracciones de la hermosa ciudad de Baños, ubicada en el centro andino de Ecuador. El martes pasado los bramidos del macizo sonaron más fuerte que nunca y el Instituto Geofísico declaro alerta naranja para toda la zona.
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Según los lugareños la noche del martes hubo “lluvias moderadas que dieron lugar a la formación de pequeños flujos de agua lodosas”, y las cenizas alcanzaron hasta 4 kilómetros sobre la cumbre, produciéndose flujos piroclásticos y fluidos de magma. La preocupación no se hizo esperar entre la población ya que en el año 1999 se tuvo que evacuar a los más de 15.000 habitantes, los cuales recién pudieron regresar ¡Después de un año!
El Tungurahua -de 5.029 metros de altura y a 135 km sur de Quito- emite lava constantemente.
En el verano del 2010 tuve la suerte de visitar la bella ciudad de Baños y comprobé in situ, que el Tungurahua es una mole que no para de hacer fuertes sonidos. De hecho, en las noches se hacían paseos en chiva (minibuses descapotados) para que los turistas y lugareños contemplaran los destellos del volcán, luego de subir por las curvilíneas faldas de éste.
En diciembre de ese mismo año las autoridades decretaron alerta roja y los habitantes de baños y los turistas debieron abandonar la ciudad. (Qué mala suerte para los que esperaban visitarlo próximamente).
“Con respecto a la actividad sísmica, la señal de tremor de emisión se mantiene, pero muestra un leve descenso en su energía con respecto a lo registrado los días anteriores”, precisó la evaluación de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR, Defensa Civil).
Aun así los pobladores más cercanos a la zona de riesgo han decidido abandonar el lugar voluntariamente, aunque esperan que la situación no pase a mayores y volcán normalice su actividad, ya que estos meses que se vienen son los más turísticos del año y a nadie le gusta dejar su hogar y su actividad económica.
Fuente:Volcán ecuatoriano mantiene actividad que obliga a elevar nivel de alerta (Biobio Chile)