PUBLICIDAD
Un colectivo compuesto por las organizaciones Greenpeace y Avaz presentó en Bruselas una petición, en nombre de un millón de ciudadanos, para que la Unión Europea -UE- vete los cultivos de organismos genéticamente modificados hasta que no se garantice que son completamente inocuos para la salud.
Las firmas se entregaron al comisario de Salud, John Dalli, y pretenden pasar a la historia como la primera iniciativa ciudadana europea, en la cual los ciudadanos puedan reclamar nuevas legislaciones si logran el apoyo de un millón de firmas.
Greenpeace y Avaz aseguraron que quieren aprovechar las oportunidades que ofrece el Tratado de Lisboa para que los ciudadanos puedan hacer propuestas legislativas, como directivas o reglamentos, a la Comisión Europea, que tiene el derecho de iniciativa en ese sentido.