Años atrás desarrollé una extraña capacidad. Estaba a cargo de la revista Mujer de La Tercera y la sección cocina estaba fatal. Esas recetas sí que no las hacía nadie. Yo tampoco, pero comencé a preocuparme de que fueran platos un tanto más comibles, que los ingredientes necesarios “existieran”, por lo que desaparecieron las torrejas, los zumos de limón y no me acuerdo que otras payasadas más y comencé a ponerle atención a la elaboración.
Mientras editaba, mentalmente hacía todos los pasos a fin de que todo tuviera cierta lógica. Y de apoco arreglando el pastel.
Después de eso nunca más me he puesto a leer recetas hasta ahora, en que todo a funcionado muy bien. De repente me he encontrado en la lista de ingredientes con cosas que nunca son empleadas durante la preparación, pero nada grave, hasta este Mousse de Ricotta. A estas alturas me merezco un reconocimiento de la editorial por poner a prueba su edición completamente gratis.
Yo traté de salvar el error de redacción, pero no sé si lo hice bien.
Lo primero es pasar 500 grs de ricotta por el cedazo. Yo usé mi colador no más y no fue fácil, pero pasó toda. A arte hay que batir 2 yemas con 60 grs de azúcar y extracto de vainilla, chorro que puse a discreción ya que no dice cuanto. Y aquí vienen los problemas.
La receta dice que acto seguido a la mezcla de yemas hay que sumarle el queso (supongamos la ricotta) y agregar la gelatina sin sabor disuelta (3 cucharaditas de gelatina en 6 cucharadas de agua) y una taza de crema. Batir muy bien hasta que se endurezca. Todo esto lo seguí al pie de la letra.
Pero a la frase siguiente agrega: “Incorporar al queso mezclando bien pero dejándola liviana y espumosa”. Entonces no entendí nada.
La gelatina era sólo al queso, pero el queso ya estaba mezclado. Tampoco me quedó nunca muy dura la mezcla de arriba porque quizás la jalea había que ponerla al queso y no al resto. No sé nada.
La cosa es que a un molde se le pone aceite y azúcar, se vacía el mousse y se refrigera por cuatro horas. Quedó deliciosos, no sé si tan mousse como mi recuerdo, no tan esponjoso o aireado diría yo. Y lo otro es que es de sabor un poquito amargo, nada de dulce, lo cual me encantó, pero sentí que quedó a medias, que le faltó una salsa, no se, algún acompañamiento.