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Cervezas de guarda

No solo el vino gana con el paso del tiempo.

Por lo general se asocia al mundo del vino todo lo relativo a la guarda de botellas durante cierta cantidad de años en busca de un mejor resultado de sabor . Sin embargo, en el mundo de la cerveza -aunque no con tanta fuerza como en el ámbito vitivinicola-  esto también se está dando.

Las cervezas  aptas para la guarda son, generalmente, del tipo Ale o similares. Hablamos de cervezas fuertes, que bordean los 10 grados de alcohol y -obviamente- que poseen un sabor fuerte, con notas de amargor y dulzura bien marcadas.

¿Qué pasa con este tipo de cerveza al pasar el tiempo? Bueno, no se trata de guardar estas botellas por décadas, pero se calcula que estas variedades pueden ganar mucho en períodos de dos a cinco años, ya que van perdiendo un poco su amargor y ganando en una especie de dulzor que las va acercando en gusto a algunos licores. Es decir, se suaviza al paladar sin dejar de tener una presencia acohólica importante. Mal que mal, tienen casi 10 grados de alcohol.

Se recomienda beber estas cervezas a unos 12 grados celsius (bastante más temperatura que otras cervezas más tradicionales como las Lager) y según algunos entendidos son altamente recomendables para acompañar carnes rojas y platos muy especiados.  ¿Le estará saliendo competencia al vino con estas cervezas de guarda?

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