En la isla de Phuket, durante el espectacular “Carnaval Magic Phuket”, la ecuatoriana Nadia Mejía hizo más que desfilar, ella contagió con su energía y proyectó al país que la vio crecer. Su participación destacó por su presencia escénica, su carisma y su conexión con el público local e internacional.

El atuendo que la hizo brillar
Vestida con un traje blanco adornado con transparencias y bordados, acompañado de accesorios y una capa ligera, Nadia brilló en una noche que evocó la alegría del carnaval tailandés.
Fue un momento de encuentro en el que la modelo bailó entre los ritmos locales, compartió risas con la audiencia y destacó la hospitalidad del país asiático. “¡Celebrar el Carnaval en Tailandia ha sido pura magia!”, escribió en redes.
Más que belleza: un símbolo de orgullo y apoyo colectivo
La participación de Nadia es, para muchos, símbolo de que Ecuador está listo para destacar. En sus declaraciones, la modelo subraya que no sólo compite por ella, sino por su gente. Además, Nadia se siente agradecida por poder conocer la cultura tailandesa y vivir tan maravillosas experiencias.

¿Por qué este paso es importante para Ecuador?
- Porque una puesta en escena internacional como esta genera eco mediático y visibilidad para el país.
- Porque proyecta una imagen de Ecuador conectada con la moda, la cultura y la presencia global.
- Porque inspira a jóvenes de todas las edades a ver los concursos internacionales de belleza como plataformas de expresión, orgullo y desarrollo personal.
- Y porque demuestra que con estilo, autenticidad y disciplina se puede competir con grandes nombres y tradiciones, imponiendo nuestra identidad propia.
Mirando al futuro con entusiasmo
Con esta presentación impecable en el carnaval de Phuket, Nadia Mejía se encamina hacia las siguientes etapas del concurso con entusiasmo, preparación y el apoyo de Ecuador detrás.
Su mensaje es claro, no se trata solo del título, sino de dejar huella, de compartir la cultura y de brillar con autenticidad. Que su participación sirva de motivación para todas nosotras.

